"Soy uno de los cantautores más vagos de la historia"
Randy Newman (Los Ángeles, 1943) suena risueño al otro lado de la línea telefónica. Un nuevo disco suyo supone todo un acontecimiento: "Sí, es cierto: sólo he hecho 10 discos de estudio en 40 años, lo que me convierte en uno de los cantautores más vagos de la historia. En realidad, tengo alergia a grabar. Por el contrario, tocar en directo es lo más divertido del mundo".
En su descargo, recordemos que su dedicación principal consiste en componer música cinematográfica, un oficio familiar: es sobrino de los ilustres Alfred y Lionel Newman y otros parientes suyos también trabajan en ese rincón de Hollywood.
En 2001 consiguió, con If I didn't have you para Monstruos SA, su primer Oscar tras 15 candidaturas: "Llegué a pensar que los Premios de la Academia eran un evento anual para humillarme en público pero aquella noche todos me aplaudían, aparentemente muy emocionados". Tiene sentimientos ambiguos sobre el arte del score: "somos los únicos compositores vivos que trabajan con orquestas sinfónicas y tienen un público masivo. Pero cuando te crees un nuevo Aaron Copland, llega un director analfabeto y se carga una de tus mejores partituras ¡y no puedes protestar!".
"Irak es una tragedia tan grande que cae fuera de mi ámbito"
"Cuando he logrado algo de éxito ha sido por razones equivocadas"
Su nueva entrega, Harps and angels (Nonesuch), contiene canciones candentes, de las que meten el dedo en el ojo. La más publicitada es A few words in defense of our country, donde -típicamente- arremete contra George W. Bush con la excusa de que ha habido peores líderes, desde Leopoldo II de Bélgica o Stalin. También menciona allí la Inquisición española. Randy explica que no quiso personalizarlo: "cuesta mucho rimar Torquemada en inglés. Bueno, hay una opción obvia, pero es que hablo de la Armada, la Armada Invencible, más adelante".
¿Cuáles son sus objeciones a la Administración republicana? "Está la guerra de Irak, que es una tragedia tan enorme que cae fuera de mi ámbito como compositor. Yo diría que lo deplorable es que Bush y su gente están tan ideologizados que no reconocen sus errores aunque los tengan delante de sus narices. Por ejemplo, la respuesta al desastre del Katrina. No se atrevieron a tomar medidas por miedo a que alguien dijera que estaban cayendo en el socialismo. Prefirieron dar contratos a las empresas amigas".
Aparte de una estancia en Marbella, Newman no conoce nada de España "y me encantaría poder actuar. Diga a los promotores que tengo dos o tres formatos. Puedo presentarme sólo con el piano, con banda o con alguna sinfónica local. Soy muy respetuoso con mi repertorio". Lo último es una referencia a Bob Dylan y sus reconstrucciones de sus clásicas: "no lo entiendo. El componer una canción supone desechar opciones y quedarte con la que te parece mejor. Si has acertado, no tiene sentido recrearlas con otras melodías".
Habla desde la envidia, reconoce. "Muchos de mis contemporáneos siguen triunfando. Digamos que si conectaste con tu generación en los sesenta o los setenta, ya tienes tu vida resuelta. Yo nunca conseguí ese impacto. Cuando he logrado algo de éxito -Short people, Rednecks, I love LA- ha sido por razones equivocadas. Mi consejo a los autores de canciones: reserva la ironía para las entrevistas. De lo contrario, te pasarás la vida explicándote y pidiendo disculpas".
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