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Los Franco alegan contra la protección de Meirás

Un total de 105 alegaciones, incluidas una extensa de la familia Franco, se presentaron contra el proceso abierto por la Consellería de Cultura para declarar Bien de Interés Cultural (BIC) el Pazo de Meirás, la propiedad pagada con fondos públicos y donada al dictador en plena Guerra Civil. Los descendientes del caudillo, que heredaron la fortaleza enclavada en Sada (A Coruña), intentaron durante un año obstaculizar la inspección de la Xunta de una propiedad inscrita desde 1991 en el Patrimonio Cultural de Galicia y cuya conservación se pretende reforzar con esta nueva figura.

Implica además devolver un mínimo uso al pazo que fue refugio literario de Emilia Pardo Bazán, al obligar a los Franco, si prospera este expediente BIC, a abrir el castillo al público cuatro días al mes. La Dirección Xeral de Patrimonio confía en responder con la mayor brevedad a cada alegación con el propósito de zanjar, antes de finales de este mismo año, el proceso de declaración BIC, iniciado en abril de 2007 a petición del Ayuntamiento de Sada.

Casi la mitad de las alegaciones de afectados, concretamente 52, coinciden en argumentar que el Pazo de Meirás no tiene valor suficiente para ser declarado Bien de Interés Cultural. Otras 45 argumentos contra el propósito de la Xunta consideran que la fortaleza ya tiene suficiente protección y no necesita que se aumente el perímetro alrededor de la propiedad, de más de 66.000 hectáreas.

Vecinos de Meirás se movilizaron para presentar alegaciones, que también suscribieron, por separado y con argumentos propios, los grupos de la oposición de Sada, donde gobierna ahora el Bloque en coalición con el PSOE.

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