_
_
_
_
_

Ridao desvincula ahora la nueva financiación de los Presupuestos de 2009

ERC prometió rechazar las cuentas de Solbes si no incluían el pacto financiero

El presidente del grupo de Esquerra Republicana (ERC) en el Congreso, Joan Ridao, fue taxativo el pasado 30 de julio después de entrevistarse con José Luis Rodríguez Zapatero. "En ningún caso Esquerra votará los Presupuestos de 2009 si el Gobierno continúa bloqueando el Estatuto y no mejora la financiación", afirmó. Ayer mismo rectificó lo dicho.

Joan Ridao compareció en conferencia de prensa tras la reunión de la permanente del partido y, con el único fin de arremeter contra Convergència i Unió, se desdijo del compromiso adquirido hace tan sólo tres meses. El diputado republicano aseguró que los presupuestos generales del Estado tienen su propia vía de negociación e independiente del nuevo sistema de financiación, basado, dijo, en la "unidad de los partidos catalanes". De ahí que Ridao no entienda las presiones de CiU hacia los socialistas catalanes para que sus 25 diputados en Madrid bloqueen las cuentas del Estado para 2009 si éstas no incluyen más recursos económicos para Cataluña. "No queremos que se engañe o confunda a la gente porque es evidente que en los Presupuestos del Estado que se votarán en el Congreso no figurará el nuevo sistema de financiación, ya que todavía se está negociando", afirmó sin ningún rubor. Y remató: "Una cosa no se puede mezclar con la otra".

Ambos asuntos, para Ridao, no mantienen vinculación alguna porque, precisó, de acordarse la fórmula de financiación, los Presupuestos podrían modificarse en 2009 mediante un "suplemento de crédito".

El socialista Miquel Iceta también se esforzó en sus llamamientos a la unidad y en mantener, contra viento y marea, el frente común suscrito la pasada semana entre el tripartito y CiU en el debate de política general. Pero advirtió de que ni el Estatuto ni esa moción parlamentaria dan pie a extraer una cifra sobre las eventuales ganancias de la Generalitat con el próximo modelo de financiación. "Es absurdo entrar en una dinámica de discusión sobre este tema", señaló.

Iceta coincidió con lo manifestado por los nacionalistas de Artur Mas en que ahora el peso de la negociación recae sobre el Gobierno catalán y de forma bilateral con el central. Pero que esa estrategia no frena, matizó, que la Generalitat continúe dialogando con CiU, porque ambos deben elaborar una propuesta mucho más concreta.

Convergència Democràtica prometió ayer mantener la unidad que le reclamaron al unísono socialistas y republicanos. "Estaremos hasta el final al lado del Gobierno, pase lo que pase desde ahora", afirmó el número dos del partido, Felip Puig. Es un compromiso que sólo perdurará, puntualizó, si el acuerdo que se alcance es "satisfactorio".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_