El lince ibérico se extinguirá si no se introduce en nuevas zonas

El lince ibérico se extinguirá si no se reintroduce lo antes posible en nuevos territorios, ha declarado en Almonte (Huelva) Urs Breitenmoser, copresidente del grupo de especialistas de felinos de la Unión Mundial para la conservación de la Naturaleza (IUCN), junto con su esposa Catherine. Este experto suizo visitó ayer Sierra Morena y Doñana, donde sobreviven las dos últimas poblaciones de lince ibérico, considerado el felino "más amenazado del planeta".

La reintroducción controlada de ejemplares de este animal reduciría el riesgo actual: los poco más de 200 ejemplares de lince ibérico que quedan están en dos únicas poblaciones y estarían en riesgo en caso de epidemias o de incendios en esas zonas. Las reintroducciones, además, paliarían el aislamiento genético que sufre el lince desde hace muchos años, tras el fraccionamiento de las poblaciones por la construcción de infraestructuras que han fragmentado el monte mediterráneo, consideran los expertos.

Según Breitenmoser, profesor de la Universidad de Berna (Suiza), el éxito del plan de cría en cautividad del lince, que en 2005 logró el nacimiento de los dos primeros cachorros y en 2008 ha conseguido 13, aporta ya una cantidad de individuos suficiente y con una variabilidad genética apropiada para las reintroducciones de animales en estas zonas. Este año, en Sierra Morena han nacido en libertad más de 50 cachorros, aumentando así la densidad de la población y la posibilidad de que algunos colonicen zonas próximas.

"El lince necesita nuevos territorios para expandirse, no basta con las poblaciones de Sierra Morena y Doñana", dijo Breitenmoser. "Hay que detener su declive genético". El segundo programa Life del lince ibérico, fija para 2010 las primeras reintroducciones en zonas de Córdoba y de Jaén.