Ahmed Diab Shueide, ministro palestino en Gaza

Hamás es un movimiento con caras conocidas y cerebros ocultos. Pero, cuando acude al hospital la plana mayor de la organización islamista tras la muerte de uno de sus dirigentes, se trata sin duda de un hombre importante para el grupo fundamentalista. Ahmed Diab Shueide, ministro de Justicia en el Gobierno palestino que dirige Gaza, falleció ayer en un hospital de la ciudad víctima de un infarto a los 59 años.

"Es una gran pérdida para nuestro Gobierno y para la población palestina", declaró el primer ministro, Ismail Haniya. Padre de 12 hijos y nacido en el distrito de Sheyaie -muy próximo a la frontera con Israel, y de los más castigados en los ataques del Ejército israelí-, era un prestigioso académico. Estudió en una universidad en Gaza, y en Jordania y Sudán. Desde joven participó en las actividades de los Hermanos Musulmanes, el movimiento egipcio del que nació Hamás, y ocupó relevantes cargos en la Universidad Islámica de Gaza, donde fue catedrático de la Facultad de la Ley Islámica. Era miembro del comité que regula las prácticas del sistema financiero y su adecuación a la sharia (ley islámica).

En sus últimos meses de vida tomó varias iniciativas para dar a conocer a la Cruz Roja la penosa situación de los presos palestinos en cárceles israelíes. Y promovió el reparto de fondos a las familias de los reclusos, al margen de su afiliación partidista. Diab Shueide también influía sobre la rama militar de Hamás, como destacaron ayer personas afines al movimiento fundamentalista.