La discusión por un coche, móvil del asesinato de la pareja descuartizada
Una resolución rápida para un crimen truculento con un móvil absurdo: la compraventa de un coche. El juez ordenó ayer la prisión de Manuel Antonio Prado Riveiro y Adriana Amenedo Carreira, dos toxicómanos de 32 años. Al primero, asesino reincidente, el magistrado le imputa el homicidio de José Manuel Gómez Rodrigo y el asesinato premeditado de Claudia Alejandra Castelo Castro, a los que posteriormente descuartizó y tiró en un monte de Ferrol (A Coruña). Su novia Adriana fue cómplice y encubridora de ambos delitos.
El primer asesinato fue el del hombre, quien murió de repetidos martillazos en la cabeza y cuchilladas tras discutir con Prado sobre la propiedad del coche. La mujer murió del mismo modo horas después, al volver a su casa de trabajar. Los cuerpos fueron descuartizados a cuchillo y llevados a la furgoneta de la discordia en el carrito del bebé de pocos meses de la pareja ahora encarcelada.
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