Los partidos ponen serias dificultades a Zapatero para apoyar los Presupuestos

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, tratará de buscar complicidades en la reunión que hoy mantendrá en La Moncloa con los líderes de los grupos parlamentarios de cara a forjar una mayoría de apoyo a los Presupuestos de 2009, cuya negociación empezará en septiembre.

Zapatero, que está a siete escaños de la mayoría absoluta en el Congreso, no dispone de socios estables. En la ronda de conversaciones previas al debate de investidura que los representantes socialistas mantuvieron con los líderes parlamentarios el presidente no intentó obtener su apoyo. Pero ahora, ante la proximidad del debate presupuestario, la necesidad de sumar votos es cada vez más acuciante.

La reunión de hoy le servirá a Zapatero para tantear posibles acuerdos. Previamente, explicará a los líderes parlamentarios las líneas generales de los Presupuestos, y recogerá sus sugerencias. En la ronda se encontrará con dificultades debido a que la crisis económica le deja menos margen de gasto y de inversiones para complacer a las autonomías. Además, la reunión se produce en medio de una complicada negociación sobre financiación autonómica.

Precisamente, los principales obstáculos para el presidente se derivan de las condiciones que le imponen muchos grupos parlamentarios en materia de financiación autonómica. CiU, que podría garantizar la mayoría suficiente para aprobar las cuentas del Estado, pondrá un precio alto en ese punto. Además, las recetas de CiU para paliar la crisis se parecen mucho a las del PP, que Zapatero ya ha rechazado.

Otra posibilidad para el presidente sería formar un bloque de izquierdas con IU, ICV y ERC, aunque con estos partidos la negociación tampoco será fácil.

El PNV está dispuesto al acuerdo presupuestario, pero antepone en la relación con el Gobierno asuntos como la consulta de Ibarretxe, frenada por el recurso del Gobierno al Tribunal Constitucional. La cercanía de las elecciones vascas, en las que el PNV compite con los socialistas, añade dificultades para cerrar acuerdos.

El BNG es, de todos los grupos, el que pone menos condiciones para apoyar las cuentas públicas. No en vano los nacionalistas gallegos gobiernan con el PSOE en Galicia. Pero por sí solos sus votos no son suficientes.

Al margen de los Presupuestos, los portavoces describen un panorama político en el que aprecian cambios en la actitud del PP. Por ello, es posible aventurar que el PSOE sufra un aislamiento en el próximo periodo de sesiones. Buena parte de ellos defienden un acuerdo entre todos los partidos para hacer frente a la crisis económica, y prácticamente todos critican duramente la actuación del Gobierno en este asunto.

Pero el motivo oficial de la convocatoria en La Moncloa es la intención del presidente de explicar a los líderes parlamentarios los acuerdos que logró el miércoles con el presidente del PP, Mariano Rajoy.

En materia de terrorismo, Zapatero trata de implicar a los demás grupos en el acuerdo de principios que logró con Rajoy para recuperar el consenso en una materia tan controvertida en la pasada legislatura. Les propondrá una estrategia compartida contra ETA sin exclusiones -en contraste con el Pacto Antiterrorista de 2000, que se limitó al PP y al PSOE-, aunque se reserva una relación "singular" con el PP, como primer partido de la oposición.

En materia de justicia, además de explicar el contenido del acuerdo con el PP, Zapatero intentará obtener contrapartidas de CiU y PNV a cambio de cederles representación en el Consejo General del Poder Judicial.