El consumo de energía creció un punto por debajo de la economía en 2007

El consumo final de energía en Euskadi creció un 2,7% en 2007, un punto menos que el PIB de la comunidad autónoma en el mismo periodo, según el balance anual presentado ayer por el Ente Vasco de la Energía (EVE), adscrito al Departamento de Industria. La factura energética se incrementó en un 6,7% respecto al año anterior, hasta 4.700 millones de euros en total, debido al aumento del precio del petróleo, que el pasado ejercicio se movió en los 72,5 dólares (46,2 euros) de media por barril. Cada ciudadano gastó 275 euros de promedio por el consumo energético en su hogar.

Los augurios para 2008 no son nada buenos para el bolsillo. El director general del EVE, José Ignacio Hormaeche, anunció que prevé "un incremento significativo de la factura", con el petróleo muy por encima de los 100 dólares (63,8 euros). La otra cara de la moneda es que la escalada de los precios podría contribuir a frenar el consumo en el sector de transportes, que se disparó un 7,5% en 2007: "Puede que, por primera vez, el gasto energético en transportes no crezca e incluso que se produzcan reducciones", vaticinó Hormaeche.

La industria es el segundo sector donde más creció el consumo, después de los transportes. Le siguen el primario (1,7%), el consumo residencial (0,8%) y los servicios (0,7%). Por territorios, Vizcaya acumula el 54% del total de Euskadi, seguida de Guipúzcoa (32%) y Álava (14%). En consumo por habitante, la lista se invierte (Álava primero, seguido por Guipúzcoa y Vizcaya). El director de EVE destacó que las medidas de ahorro energético han permitido ahorrar un equivalente al 7,4% de la demanda energética en 2007.

Pocas renovables

El petróleo supone el 40,6% del consumo de energía, el gas natural el 39,2%, la electricidad importada contribuye con 8,9% y los combinados sólidos llegan al 5,9%. El directivo admitió que el objetivo de alcanzar el 12% con energías renovables para 2010 no podrá ser cumplido, teniendo en cuenta que, a dos años de esa fecha, apenas suponen un 5,1% de la tarta energética. Hormaeche señalo que proyectos eólicos que no salieron adelante, como el de Ordunte, han desalentado el impulso de esta energía limpia (estaba previsto que generaran 625 MV, y en la actualidad sólo llegan a 153). También abogó por potenciar el uso de los biocarburantes y de la nueva técnica para captar la energía de las olas en el mar, augurándole a ésta un papel relevante a medio plazo.