Obama propone un aumento de tropas en Afganistán

El candidato demócrata a la presidencia de EE UU, Barack Obama, propuso ayer un aumento de 10.000 soldados en el número de soldados destinados a Afganistán. En un artículo publicado en el diario The New York Times, el senador de Illinois esbozó el plan de seguridad nacional y defensa contra el terrorismo con el que acudirá a las elecciones presidenciales de noviembre. "No permitiré que nuestro Ejército, nuestros recursos y nuestra política exterior sigan siendo cautivos de un erróneo deseo de mantener bases permanentes en Irak", dice el candidato.

El senador confirma que, como presidente, su prioridad en la lucha contra el terrorismo sería la batalla que se libra en Afganistán desde 2001. "Introduciré una nueva estrategia, comenzando por aportar dos nuevas brigadas de combate a nuestros esfuerzos en Afganistán", explica.

Obama mantiene intactas sus críticas a la invasión de Irak. "Me opuse a la guerra de Irak antes de que comenzara y acabaré con ella cuando sea presidente", promete el senador en el artículo. "Es esencial acabar con esta guerra para poder acometer otros objetivos estratégicos, comenzando por Afganistán y Pakistán, donde los talibanes están ganando fuerza y Al Qaeda ha encontrado santuario. Irak no es el frente principal en la guerra contra el terrorismo, y nunca lo ha sido", añade.

El candidato demócrata planea retirar todas las tropas de Irak a los 16 meses de tomar posesión de su cargo, dejando en el país una presencia "residual", que "acometería misiones limitadas: perseguir lo que quede de Al Qaeda en Mesopotamia, proteger a los miembros de los servicios estadounidenses y, siempre que los iraquíes sigan haciendo progresos políticos, entrenar a las fuerzas de seguridad iraquíes".

En los últimos meses, la violencia en Afganistán ha aumentado alarmantemente para los aliados del Ejército de Estados Unidos. El domingo, nueve soldados de la OTAN fueron asesinados y 15 resultaron heridos en el ataque más grave acometido por los rebeldes talibanes en los últimos tres años. Sólo en el mes de junio se han registrado 49 bajas militares entre los aliados.

Por otra parte, el senador criticó ayer la portada de la nueva edición de la revista semanal The New Yorker en la que se le muestra con un atuendo islámico, frente a un retrato de Osama Bin Laden y mientras una bandera estadounidense arde en la chimenea. Su esposa, Michelle, lleva una metralleta en la espalda. "Muchos lectores lo verán como algo carente de gusto y ofensivo. Y nosotros lo vemos igual", dijo su portavoz, Bill Burton. La revista ha matizado que su intención era "satirizar" las dispares críticas lanzadas contra Obama.