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Entrevista:MARIANO DE MINGO

"Dos años en lista de espera y nos mandan a 25 kilómetros de casa"

Celia de Mingo, que hoy tiene nueve años, se quedaba afónica con mucha facilidad. Solía volver del colegio sin voz. Los demás niños también gritaban como posesos en el recreo. Lo normal. Pero a ella le afectaba más. El otorrino diagnosticó nódulos en las cuerdas vocales. Y prescribió rehabilitación. Eso fue en marzo de 2006.

Así que su madre, Raquel, maestra de 44 años, fue al mostrador de su centro de especialidades, en Collado Villalba, a pedir la cita. "Le dijeron que había un año de lista de espera. Intentaron desanimarla para que no se apuntara", relata el padre, Mariano. Les ofrecieron una alternativa: probar en el hospital de la Cruz Roja, en Madrid. Iría más deprisa, les prometieron. Pero decidieron apuntarse a la lista de Collado Villalba y esperar a que la única foniatra atendiera a Celia. "Nos venía fatal ir a Madrid. Son tres veces por semana. Con los colegios de los niños, los trabajos... Imposible", justifica.

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Al final no fue un año de lista de espera, cuenta. Fueron dos. Y no les iban a atender en Collado Villalba, sino en un centro privado de Las Rozas. Celia empezó a ir a consulta el pasado marzo. Mientras esperaban, llevaron a la niña cuatro meses a un centro privado cerca de casa. Les salió por 220 euros al mes. Ahora lo que cuesta dinero es el coche. Mariano tiene hecho el cálculo. Desde que sale de su casa, en Alpedrete, hasta que se planta en la puerta de la clínica, 26 kilómetros. Ida y vuelta. Tres días y 156 kilómetros por semana. Con el gasóleo a 1,30 euros... Una pasta.

Mariano presentó una queja. El director del área 6 contestó que "los centros concertados para la rehabilitación de otorrinolaringología en esta área están ubicados en la calle de Cea Bermúdez de Madrid y en Las Rozas". Ni palabra de que en Collado Villalba hay un profesional que también ofrece el servicio. "Los recursos de los que disponemos son limitados", admite la carta. Una explicación que no convence a Mariano: "El dinero que se va en concertar, que lo usen para dotar la sanidad pública".

Mariano de Mingo, con su hija Celia y el hermano gemelo de ésta, Raúl, en su casa de Alpedrete.
Mariano de Mingo, con su hija Celia y el hermano gemelo de ésta, Raúl, en su casa de Alpedrete.CRISTÓBAL MANUEL
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