Urkullu asegura que no hay 'plan B' en caso de que fracase la consulta

El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, afirmó ayer que no existe un "plan B" ante la eventualidad de que el proyecto de ley de la consulta que debate el Parlamento vasco el próximo viernes no salga adelante por no apoyarlo al menos uno de los nueve parlamentarios de EHAK. "En ese caso, tendríamos que analizar la situación y ver qué pasos damos", manifestó en una entrevista en Radio Euskadi. Urkullu apuntó que esta reflexión tendrá que darse dentro del Gobierno tripartito, porque la consulta que impulsa el lehendakari es una iniciativa "institucional", pero también dentro de cada uno de los partidos que sustentan el Ejecutivo.

Pastor acusa a Ibarretxe de "dividir a los vascos" para seguir gobernando

El líder peneuvista se mostró esperanzado en que "podamos aprobar el proyecto de ley de consulta". No obstante, preguntado sobre la actitud que adoptaría su partido en el caso de que el Tribunal Constitucional suspenda cautelarmente la celebración de la consulta por el anunciado recurso del Gobierno central, Urkullu reiteró que, pese a discrepar de la resolución, el PNV la acataría, porque "siempre hemos tenido a gala cumplir con la legalidad". "Solamente desde dentro de la legalidad creemos que se puede cambiar la propia legalidad, y a eso aspiramos", señaló. Esta posición contrasta con la mantenida con el consejero de Justicia y dirigente de Eusko Alkartasuna, Joseba Azkarraga, que la pasada semana manifestó que el Gobierno vasco tiene un "plan B y un plan C" en el caso de que se prohíba la consulta, sugiriendo que podrían tomarse iniciativas políticas o de otro tipo para contrarrestar la decisión del Constitucional.

Por su parte, el presidente del PNV de Vizcaya, Andoni Ortuzar, señaló en declaraciones a Efe que su partido no confía en EHAK, que el día 27 hará lo que crea que "más daña al PNV y al lehendakari". Pese a ello, no puso ninguna objeción a que el grupo de la izquierda abertzale utilice sus votos decisivos para permitir que salga adelante la iniciativa de Ibarretxe. Alegó que sus nueve diputados tienen sus derechos intactos, por lo que "habrá que aceptar [sus votos] hagan lo que hagan: si votan que sí y si votan que no".

El secretario general del PSE de Vizcaya, José Antonio Pastor, considera que Ibarretxe utiliza la consulta para "poder mantenerse en el Gobierno tras las próximas elecciones". En un acto político celebrado ayer para reabrir la sede socialista de Derio, dañada por una bomba de ETA el pasado 29 de febrero, Pastor acusó al lehendakari de "dividir a los vascos" con tal de ganar, desoyendo la opinión de la "inmensa mayoría" de los ciudadanos.