Londres paraliza la ratificación

El Gobierno británico paralizó ayer el proceso de ratificación del Tratado de Lisboa hasta que la justicia se pronuncie sobre la reclamación de un multimillonario tory, Stuart Wheeler, de que se convoque un referéndum de ratificación. El jueves, la justicia se pronunció contra una reclamación distinta: la de un diputado conservador que sostenía que el tratado no se puede ratificar debido al no irlandés. El juez le contestó que ésa es una decisión política, que es el Parlamento, y no la justicia, quien tiene la palabra. El tratado está políticamente ratificado porque la propuesta de ley para adoptarlo ha recibido el visto bueno de los Comunes y los Lores y el asentimiento de la reina, pero falta un trámite: el Reino Unido ha de depositar los instrumentos del tratado en Roma.

La paralización no tiene por qué retrasar el proceso legal, porque el Gobierno no tenía previsto terminarlo hasta julio y la decisión judicial sobre el recurso de Wheeler se espera la próxima semana. Pero es políticamente muy significativa porque se produce a instancias de la justicia, lo que da a entender que las posibilidades de que los jueces se pronuncien a favor de un referéndum son reales. Y eso sí que provocaría una crisis europea porque hoy por hoy se considera imposible que los partidarios del Tratado de Lisboa puedan ganar un referéndum en el Reino Unido.

El lord juez Richards, que junto al juez Mackay está encargado de pronunciarse sobre la reclamación de Stuart Wheeler, ha escrito una carta a Downing Street y al Foreign Office en la que dice: "El tribunal está muy sorprendido de que el Gobierno aparentemente se propone ratificar cuando aún está pendiente la reclamación en los tribunales por la decisión de no convocar un referéndum de ratificación".

El primer ministro, Gordon Brown, se apresuró a declarar en Bruselas, donde asiste al Consejo Europeo, que no habrá ratificación oficial hasta que se pronuncie la justicia. "El juez nos ha dicho que espera hacer pública su decisión la próxima semana y, por supuesto, eso se ajusta a nuestro calendario; tenemos ya el asentimiento real y hay que proceder a diversos procedimientos previos a la ratificación". "Por lo tanto, la ratificación no se producirá hasta que tengamos el pronunciamiento de los jueces", añadió.