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Reportaje:

Oryzon hace diana

La biofarmacéutica obtiene 14 millones de capital y se prepara para salir a Bolsa

La empresa biofarmacéutica Oryzon ha hecho diana. No sólo ha identificado nuevas proteínas -dianas terapéuticas- para incidir en enfermedades neurodegenerativas, como el alzhéimer o el párkinson, desde una aproximación muy novedosa, y biomarcadores tempranos para combatir varios tipos de cáncer. También acaba de culminar su segunda ronda de financiación, que le permitirá obtener 14 millones de euros para desarrollar su ambicioso plan de crecimiento durante los próximos cuatro años.

Oryzon es una spin-off (surge de la investigación en el ámbito universitario) creada en 2000 en Barcelona, que emplea a 65 investigadores y factura cinco millones de euros. Está participada por el fondo de capital riesgo Najeti, la farmacéutica Ferrer, Laboratorios Ordesa y la sociedad catalana de capital riesgo Corsabe, y cuenta además con créditos blandos de varias instituciones públicas.

En el horizonte de 2011, tras invertir entre 18 y 20 millones de euros, contempla unos ingresos de entre 15 y 20 millones, una plantilla de más de 100 personas "y un par de licencias, una en cada campo de investigación", confía Carlos Buesa, director general y cofundador de Oryzon junto a su esposa, Tamara Maes.

Sus trabajos están hoy en fase preclínica (pruebas en laboratorios y animales). Calcula que efectuará las primeras investigaciones clínicas en humanos en 2012. Para entonces, Buesa espera haber convertido a Oryzon en una biofarmacéutica "de referencia europea" y, en el camino, participar en el "inevitable" proceso de concentración que requiere un sector en el que "el tamaño importa mucho". El desarrollo de un medicamento nuevo es muy largo y costoso; sin músculo financiero es muy difícil sobrevivir. Tras la inyección de capital, Oryzon tiene pulmón seguro durante cuatro años.

Pero tiene vocación de salir a Bolsa y ha iniciado los trámites para tener los deberes hechos para la ocasión: "Ahora no parece el mejor momento", señala Buesa. La empresa ha aprobado la transformación de las acciones en anotaciones a cuenta y está elaborando los requisitos relativos al gobierno corporativo. La opción preferida es el Mercado Alternativo Bursátil (MAB), en funcionamiento desde diciembre, una suerte de versión española del Alternex de París o del AIM de Londres. "Pero si no tira, como parece, pensaremos en otras plazas", señala el bioquímico nacido en Zaragoza. Renta 4 ha valorado en 40 millones de euros la empresa.

De momento, Oryzon mantiene alianzas estratégicas con uno de sus socios, Ferrer, con el que lidera el proyecto Oncnosis, uno de los mayores programas de investigación oncológica de la industria española -ganador de un Cénit del Ministerio de Industria- para identificar marcadores tempranos en cuatro cánceres: pulmón, ovario, melanoma y colon, y también colabora con Laboratorios Roig-Jofré para combatir el cáncer de endometrio. -

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