Un equipo de fútbol se negó a ir a Ascó por la radiactividad

El equipo infantil del Jesús Catalònia no se presentó el sábado a jugar un partido ante el CE Ascó porque varios padres de los jugadores se negaron a que sus hijos disputasen el encuentro por miedo a las consecuencias de la reciente emisión radiactiva de la nuclear de Ascó I. La central atómica de Ascó está situada a 500 metros del campo de fútbol municipal.

"Desde el club existe confianza en lo que explican las administraciones en cuanto a la seguridad de la zona, pero debemos respetar escrupulosamente la decisión de los padres, que no acababan de ver con buenos ojos que sus hijos jugasen allí a raíz de las noticias aparecidas en la prensa en los últimos días", explicó ayer Joaquim Amare, presidente del Jesús Catalònia, club radicado en Jesús, núcleo perteneciente a Tortosa.

El día anterior al partido, los padres de los infantiles del Jesús Catalònia expresaron al club sus dudas sobre el partido de Ascó, finalmente, traducidas en una ausencia masiva de jugadores.

"Pese a ello, un jugador y el entrenador se presentaron en Ascó, para demostrar que no existe problema alguno con el club y que no nos presentamos por falta de jugadores", comentó Amare.

El club de Tortosa siempre había disputado sus partidos en Ascó con absoluta normalidad, "y lo seguiremos haciendo en cuanto desaparezca este cierto temor de los últimos días", según Amare.

El presidente del CE Ascó, Miquel Pérez, explicó que el Consejo de Seguridad Nuclear ha certificado que las instalaciones del club estaban en perfecto estado y que no existía riesgo alguno. "Es totalmente descartable que haya alguna partícula en la zona, según los resultados de las investigaciones", comentó Pérez, que consideró "exagerada" la decisión del Jesús Catalònia.