Los 462 niños de la secta polígama, apartados de sus madres

Llevan tres semanas a cargo del Estado de Tejas. Han estado viviendo en diversos recintos de la ciudad de San Angelo, a 71 kilómetros del rancho en el que vivieron durante cuatro años bajo el liderazgo de los sacerdotes de la Iglesia Fundamentalista de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, una secta escindida de la fe mormona por su férrea adhesión a la poligamia. Ayer, los 462 niños que supuestamente han sido sometidos a abusos comenzaron a ser trasladados a diversos puntos del Estado, donde vivirán con familias de acogida mientras duren los juicios sobre su custodia.

El jueves, los agentes de la policía estatal dieron a sus madres dos opciones: volver al rancho o quedarse en un "lugar seguro" de San Angelo. "Sólo siete mujeres han regresado al rancho. A 40 las hemos trasladado a un centro de acogida", dijo el portavoz de la Agencia de Protección de Menores, Darrell Azar.

Miembros de una hermética secta, estas mujeres expresaron desesperadamente su malestar al montarse en los autobuses de la policía. Una de ellas exhibió un cartel en el que se leía: "SOS. Madres separadas. Ayuda". "No hay palabras para describir lo que estamos viviendo", explicaba a los medios Velvet, una madre que se negó a dar su apellido. "Hemos permanecido despiertas toda la noche para cuidar de los niños. No sabíamos qué iba a suceder", dijo, confundida.

Petición rechazada

Horas antes, la Tercera Corte de Apelaciones de Tejas había rechazado la petición de las madres de que se detuviera el traslado de sus hijos a estas casas de acogida. La juez Barbara Walther había anunciado que cada madre dispondrá de una audiencia personal a partir del próximo 5 de junio. El abogado Robert Doggett, que representa a 48 madres (al cargo de más de 400 niños), expresó su rechazo a esta decisión.

En principio, Protección de Menores pensó que los niños a su cargo eran 416. Pero el martes los agentes comprobaron que un grupo de 21 mujeres que se había quedado provisionalmente en los lugares de acogida había mentido. Eran, en realidad, madres menores de edad. El jueves volvieron a investigar y se encontraron con otras 25 madres que no han cumplido los 18. Son, en total, 462 niños y adolescentes que por vez primera sabrán qué es la vida lejos de Anhelo de Sión, el rancho en el que vivieron cuatro años.