Menos corbatas y más mujeres

Todo son corbatas". Cuando a María Paz Sánchez le corresponde hablar ante el Consejo de Negocios de General Electric (GE) para España y Portugal -una reunión anual de directivos para definir estrategias- emplea estas palabras al inicio. Una forma de distensión, sí, pero también de provocación, cierta queja y ganas de cambiar las cosas. Todo, o gran parte, son corbatas. En concreto, cuatro de cada cinco miembros de dicho consejo son hombres. Y eso que GE (con 300.000 empleados; de ellos, más de 3.500 en España y Portugal) es una de las empresas que más está haciendo por promover los ascensos internos de las mujeres, que representan algo más de un tercio de su plantilla.

Esta voluntad la demuestra la existencia de su Red de Mujeres (Women's Network, en su denominación internacional), "una organización voluntaria, con la misión de fomentar el desarrollo profesional de la mujer" y "atraer, retener y ayudar a crecer profesionalmente a mujeres con talento en GE", según sus documentos de presentación. La red -integrada en la política de promoción de la diversidad en la firma- lleva ya cinco años operando en nuestro país y más de una década internacionalmente. Muy por delante, por tanto, de la ley de medidas para la igualdad efectiva entre mujeres y hombres, aprobada hace poco más de un año.

Red de Mujeres (Women's Network) es una organización voluntaria con la misión de fomentar el desarrollo profesional de la mujer

El primer Monitor Español de Igualdad Laboral señala que el peso de la mujer en los niveles jerárquicos de la empresa sigue siendo muy escaso

Redes sociales

María Paz Sánchez, directora de Operaciones de la división Capital Solutions de GE, se encuentra al frente de la Red de Mujeres española y portuguesa, de la que forman parte unas 200 integrantes. Nacida a imitación de su red homónima internacional, cuenta con el apoyo de la alta dirección y se enfoca hacia el fomento "del liderazgo, el avance y la apertura de nuevas oportunidades para la mujer a través de la información, la formación y las redes sociales (networking) con otras mujeres". "El poder en las empresas sigue en manos de los hombres; en los puestos de dirección, la mayoría masculina es aún muy alta". La responsable de la red española sabe que este combate es a largo plazo, siendo optimistas quizás a medio plazo, dondequiera que esté situada esta indefinida dimensión temporal. Entre las integrantes más veteranas de la Red de Mujeres se encuentra Leticia García, responsable de Gestión de Clientes en GE Capital Solutions. "Te transmiten el valor del tú puedes", sintetiza gráficamente al referirse a una de las actividades de la red: organizar reuniones con mujeres que han logrado ocupar altos cargos en la firma internacionalmente. "Son unos contactos", afirma, "muy personales, participativos y cercanos, en los que nos sentimos cómodas y en los que intercambiamos opiniones con mucha naturalidad".

"Te impacta la trayectoria de la persona que ha logrado una posición de liderazgo", prosigue Leticia García, para quien estos eventos son además una oportunidad para que las mujeres "tengamos un conocimiento privilegiado de la organización, sepamos lo que es la firma y hacia dónde va". Además, agrega, "te permiten conocer a personas de todas las áreas, creando amistades a las que puedes acudir y que pueden derivar en oportunidades de trabajo". Los encuentros y reuniones, formales o no, configuran la parte más importante de esta red. No son sólo con mujeres que han destacado; también con hombres que ayudan a comprender el funcionamiento de la compañía. Las actividades de formación en determinados campos relacionados con la profesión son la otra pata principal de esta iniciativa.

Efecto en parte de su Women's Network, GE ha pasado de tener menos del 10% de mujeres en cuadros directivos hace una década a disponer de un 21% en 2006 en el conjunto de la firma (un 20% en España y Portugal, con datos de 2007). La Red de Mujeres, tanto en nuestro país como internacionalmente, cuenta con el respaldo del departamento de recursos humanos, pese a no tener un encaje orgánico oficial en GE. Algo que no exime, explica María Paz Sánchez, de que todos los años estén obligadas a elaborar para la dirección un informe estadístico metódico con los detalles de los actos organizados, sus resultados y los gastos acarreados. Un síntoma de que la empresa quiere sacarle provecho a la red en la promoción del liderazgo de las mujeres.

Este incremento del liderazgo femenino es, precisamente, una de las misiones de la ley de igualdad de marzo de 2007. Al cumplir un año, esta semana se ha dado a conocer el primer Monitor Español de Igualdad Laboral, elaborado por Adecco, la consultora Villafañe y Asociados, y el Instituto de Empresa. Según sus conclusiones, "el peso de la mujer en los niveles jerárquicos sigue siendo muy escaso: 5% en el consejo de administración, 8% en la alta dirección y un 17% entre los cuadros directivos".

Participación equitativa

Con todo, casi dos tercios de las empresas españolas declaran que cumplen con dicha ley en lo que se refiere a la aplicación de algunas medidas para la equiparación de hombres y mujeres, en particular en la implantación de iniciativas para evitar el acoso laboral y la discriminación. Además, un 48% de las empresas (las de más de 250 empleados están obligadas por ley) dice que ha elaborado o aplica ya su plan de igualdad. Un 20% de las compañías participantes en la muestra (un total de 124 de todos los sectores) asegura fomentar la participación equitativa en los consejos de administración.

Para el futuro, el informe se muestra optimista: "Las empresas españolas", señalan sus autores, "se encuentran en un camino sólido hacia la representación igualitaria". Según los datos de la consultora de recursos humanos ICSA, en 2007 la brecha salarial en España entre hombres y mujeres en puestos directivos se redujo hasta el 10% frente al 12,3% de 2006. Aún hay mucho que hacer.