Desarticulada una banda que explotó a 2.000 prostitutas rusas
La policía ha detenido desde 2006 a 76 miembros de la red por tráfico sexual
La policía ha desarticulado la mayor red de traficantes de mujeres rusas, que desde 2005 trajo a España unas 2.000 jóvenes para ejercer la prostitución, y ha detenido a sus 76 miembros en las provincias de Almería, Granada, Lérida y Girona. En la operación han sido arrestadas alrededor de 400 prostitutas. La inmensa mayoría han sido deportadas a Rusia por estancia irregular.
Las mujeres vivían hacinadas en "pisos patera", y amenazadas. La banda les tenía atemorizadas con "multas económicas", según la policía. "Casi ninguna de las chicas ha sido engañada. Sabían a lo que venían", explicó un subinspector del Cuerpo Nacional de Policía.
Los cabecillas eran propietarios de los clubes Carambola, H2, Canela y Manhattan del poniente almeriense y estaban casados con ciudadanas rusas que ejercían de madames para captar a las jóvenes rusas. "Después de tres meses trabajando para el club y saldar su deuda, a las chicas les ofrecía dejarlo o rotar por los diferentes locales de alterne", indicó el agente. El núcleo duro de la red eran 11 personas que operaban en clubes de alterne de El Ejido y Roquetas de Mar y que ya han ingresado en prisión en la tercera fase de la operación Zarpa, que se saldó el pasado fin de semana con 24 detenidos, 60 mujeres arrestadas por infringir la Ley de Extranjería, y 53 imputadas en Rusia. Se les acusa de presuntos delitos relativos a la prostitución, contra los derechos de los ciudadanos extranjeros y blanqueo de dinero.
Según la policía, habían acumulado un inmenso patrimonio. Para blanquear el dinero utilizaron a sus familiares, también arrestados y a nombre de los cuales figuraban los 14 pisos intervenidos. En la operación policial, dirigida por el Juzgado de Instrucción 5 de El Ejido, han participado 70 agentes que intervinieron 14 viviendas, siete vehículos de lujo, dos furgonetas, dos armas ligeras, ordenadores, pasaportes y 123.000 euros en metálico. Los investigadores calculan que la banda envió más de dos millones a Rusia a través de testaferros.
"Pese a que en la primera fase algunas mujeres colaboraron, ahora la colaboración ha sido nula y nos han torpedeado con nombres falsos", aseguró el subinspector de policía.
La investigación se inició hace un año y medio a cargo de la Brigada Central contra las Redes de Inmigración Ilegal (UCRIF), que ha colaborado con las unidades destinadas en Almería y Alicante, además de la Brigada de Investigación de Delitos Monetarios del Banco de España y la Interpol.
Los agentes han detenido también a las camareras de los locales de alternes como cómplices por retirarles los pasaportes a las jóvenes. Las 60 mujeres arrestadas el pasado fin de semana por estancia irregular han sido trasladadas a diferentes Centros de Internamientos para Extranjeros (CIE), y serán deportadas a Rusia en las próximas semanas. Y los detenidos en la segunda fase de la operación, José Nunes Gonzalves y su hijo Bruno Felipe Nunes, de nacionalidad portuguesa, han obtenido recientemente la libertad después de 11 meses en prisión preventiva. "No podemos parar este tráfico ingente, pero se trata de que todos los clubes grandes del poniente almeriense pasen por la cárcel", concluye el agente.
La operación
- La policía ha deportado a 400 mujeres a Rusia por estancia irregular.
- La red envió más de dos millones de euros a través de testaferros.
- Los cabecillas de la banda están acusados de delitos relativos a la prostitución, agresiones sexuales y blanqueo de dinero.
- Los investigadores han intervenido 14 viviendas, siete coches de lujo, armas, ordenadores y 123.000 euros en metálico.
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