Pascasio y Benigna salen en el móvil
La telefonía celular ha llegado a todos los rincones del mundo - España ya tiene más móviles que habitantes - A Castillo aún no ha llegado la Televisión Digital Terrestre, pero sí la televisión a través del teléfono
Jerónimo está feliz: "Me pongo a jugar con él y hasta los muebles de la casa me salen en el teléfono. Yo, enviar mensajes no sé". A Castillo llegó el móvil el pasado año y este extremeño de 67 años está feliz. En invierno, en este pueblo de Las Hurdes residen 60 personas y una antena de telefonía en lo alto de la montaña. Con el calor llegan más.
"Hay alquerías que ni siquiera tienen cobertura. El problema que tenemos aquí es la orografía. Cada montaña hace sombra sobre una alquería", explica José Antonio Caldoria, alcalde de Pinofranqueado, municipio del que depende Castillo.
Hoy hace un día soleado. El bar La Pizarra abre pronto. Rosa está en el jardín. Hipólito se acaba de levantar. En el puchero, la patata y la costilla de cerdo cuecen a fuego lento. Los habitantes de Castillo salen de sus casas a los gritos de su alcalde. Bueno, del vozarrón de su joven alcalde y del claxon de la furgoneta del pan. La panadera no tiene móvil: "Así no saben dónde voy", y lanza una carcajada. Vende la barra a 95 céntimos. Tras la compra, el punto de reunión es el bar de Matilde Sánchez -sus padres son los que posan felices para la foto que toma con mucho cuidado Jerónimo con su nuevo móvil-. Matilde, una mujer muy amable, ha vivido siempre en Castillo, donde tiene gran parte de la familia. Regenta el bar La Pizarra y una pequeña tienda. "Primero tuvimos un teléfono público; el fijo llegó hace 10 años y el pasado pusieron la antena de telefonía. Mi marido tiene móvil, pero yo no lo uso", explica.
Más móviles que habitantes
Ya son más de 50 millones de móviles en España. Los datos de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) indican que hay 1,12 móviles por habitante.
En 1998, cuando nació el Ciberp@ís, eran sólo 6,5 millones de clientes de telefonía móvil. Ningún otro aparato tecnológico ha crecido a un ritmo tan rápido como el móvil, en España como en el mundo. Tanto, que el futuro tecnológico va a caballo de este aparato de mano.
Por primera vez, en 2003 la gente se gastó más en llamar por el celular (8.811 millones de euros) que por la línea fija de sus hogares (8.254 millones).
"A todo el mundo le sirve el móvil. Mucha gente se está quitando el fijo y si lo mantiene es por el ADSL, aunque aquí funciona a pedales", dice Caldoria. "Pese a que la antena de telefonía móvil es de Vodafone, quien más esfuerzo está haciendo ahora mismo en el territorio es Movistar".
Los jóvenes del pueblo estaban deseando que llegara el móvil para comunicarse con los jóvenes de otros sitios. Los mayores lo usan para las emergencias y para hablar con sus hijos que viven y trabajan en la ciudad. A los mayores les da tranquilidad. Hipólito Sánchez, tras 23 años trabajando en el norte de España haciendo carreteras, volvió al Castillo. Baja las escaleras de su casa y se pone la chaqueta de cuero. "Yo ya estaba fuera cuando pusieron el teléfono". Ahora desenfunda un bonito y llamativo móvil rojo. "Esto es una cosa muy buena. Me voy a dar una vuelta y si me pasa algo llamo a mis hijos". Aunque Hipólito también expone al alcalde -presente en la conversación- su hoja de reclamaciones: "La semana pasada se colgó la red y no pudimos usar el móvil".
Si la voz en el bolsillo cambió el mundo, los mensajes cortos lo revolucionaron. El short message service, creado por el ingeniero estadounidense Neil Papworth, ya ha cumplido 15 años. Y con él una nueva generación de adictos al móvil y un nuevo lenguaje comprimido en 160 caracteres. Casi 7.000 millones de mensajes cortos se envían cada día. Al texto le siguieron los mensajes multimedia que no han logrado arrebatar ni un grado de protagonismo a los SMS. Es breve y barato. En 2002 los clientes de Amena, Telefónica Móviles y Vodafone ya habían logrado enviar y recibir mensajes con imágenes y sonido.
"Mi marido tiene un modelo de estos sencillos, con SMS pero sin cámara de fotos", explica Matilde. Un total de 112 operadores lanzaron en el mundo entre 2003 y 2007 los servicios multimedia, que envían imágenes y sonidos por el móvil. Los teléfonos con cámara ya van en el 60% de los móviles vendidos, como se demuestra con varios vecinos de Castillo.
El siguiente salto fue el 3G y la conexión de alta velocidad para conectarse a Internet, y que abre las puertas a todo, por ejemplo a ver la tele. En teoría, en este pueblo es más fácil (y más caro) ver la tele por el teléfono que por las antenas convencionales.
En Castillo son muy pocos los que se conectan a Internet a través del móvil, un servicio que en otros lugares ya tiene nueve años de vida, aunque hasta este año para muy pocos, por las dificultades técnicas y por las exorbitantes tarifas. En 1999 Nokia anunció la salida al mercado del primer teléfono compatible con WAP, que permitía recibir información especialmente preparada para pequeñas pantallas y transmitida por Internet.
En Castillo, al mediodía, todo está en calma. En el bar La Pizarra es pronto para el carajillo. La carnicería, uno de los comercios del pueblo, hace años que cerró. También la escuela y la casa del maestro, frente a casa de Rosa. Aquí no llega la "prensa nacional" ni la TDT. Por eso, si quisieran, podrían ver algunos canales antes por el móvil que por el televisor.
A Marci Gómez, aunque es el campeón de las telecomunicaciones del pueblo, tampoco le urge la tele por el móvil. Tiene 26 años y lleva en esta alquería de Las Hurdes desde siempre. Hace casi una década que dispone de móvil. No uno, sino dos. Tiene contrato con Movistar, que funciona en Pinofranqueado, pero no en su casa. Además, dispone de un móvil de tarjeta Vodafone. "Tenemos un poste, pero la cobertura es pésima", se lamenta Marci. "A veces me conecto a Internet, pero no me bajo nada porque es muy caro". A la hora de partir, Benigna despide a los visitantes sentada en un banco a la salida del pueblo. Desde que tienen móvil hay más vida en el pueblo.
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