Telefónica espera que Chávez no le ponga trabas para repatriar fondos

Telefónica repatrió el año pasado 2.250 millones de euros de Latinoamérica (un 10% menos que en 2006) como parte de su política para mitigar el riesgo en la zona, según explica en su memoria, publicada ayer. Más de la mitad del capítulo empresa dedica este año a Venezuela más de la mitad del capítulo de riesgo país. El grupo espera que las autorizaciones para sacar dinero se produzcan "con la misma diligencia y frecuencia que en el pasado, de manera que se pueda continuar con el desarrollo normal de los negocios en Venezuela y con capacidad para repatriar fondos".

El mensaje tiene que ver ante todo con el régimen cambiario venezolano. Las empresas extranjeras pueden solicitar sacar fondos al cambio oficial de 2,15 bolívares por dólar. La existencia de un tipo paralelo 4,3 bolívares es una permanente amenaza de devaluación, por lo que a las empresas les interesa sacar dinero del país. Pero más allá del régimen cambiario, el mensaje de normalidad de Telefónica llega tras un año de recurrentes amenazas del presidente venezolano, Hugo Chávez, a las empresas españolas a raíz de su enfrentamiento con el Rey.

Telefónica está pendiente de que le aprueben un dividendo récord de 365 millones de dólares (más de 230 millones de euros), tras los 137 y 240 millones de dólares repatriados de Venezuela en 2006 y 2007.

Amortización de acciones

La memoria anual del ejercicio más brillante en la historia de la compañía desvela también que Telefónica cerró 2007 con una autocartera de 64,47 millones de acciones (un 1,35% el capital) adquirida a un precio medio de 16,67 euros por título. Precisamente, la compañía que preside César Alierta ha propuesto a la junta del próximo 22 de abril la amortización de 68,5 millones de acciones (el 1,43% del capital). La recompra de acciones forma parte de la remuneración al accionista de Telefónica, que en 2007 alcanzó un nivel récord de 4.893 millones (3.100 en dividendo y 1.800 en recompra).

El informe anual también recoge que la retribución del consejo creció un 37,1% en 2007 hasta 21,18 millones. Esa cifra incluye dos liquidaciones extras cobradas por Peter Erskine por 4,45 millones de euros, pero no otra paga de 24,33 millones por diversos conceptos para el propio Erskine a su cese. Si a eso se suma el sueldo y el bono, Erskine ha cobrado más de 30 millones.

Sin tomar en cuenta las pagas extras de Erskine, la retribución del consejo crece un 8%. Telefónica no publica el sueldo individualizado de sus consejeros ejecutivos alegando que su publicidad "podría de alguna manera perjudicar los intereses sociales". Es una de las recomendaciones del Código Unificado de gobierno corporativo que no cumple. Tampoco sigue la de someter a la votación de la junta un informe con las retribuciones, la de no limitar los derechos de voto de los accionistas y la de que el consejo no tenga más de 15 miembros. La empresa declara que cumple 51 de las 58 recomendaciones, aunque al menos una de ellas (la de diversidad de género) no la cumple en realidad.

Telefónica fue líder mundial del sector por beneficios en 2007, con 8.906 millones (+43%). Las grandes filiales históricas de la compañía impulsaron el resultado. Telefónica Móviles España elevó su beneficio un 18,7% hasta 2.484 millones; Telefónica de España ganó 2.273 millones, un 59,3% más, y Telefónica Internacional aumentó sus ganancias un 37% hasta 1.623 millones. Telefónica Móviles México, tradicionalmente deficitaria, redujo sus pérdidas un 30% hasta 544 millones, según la memoria.

Telefónica cerró 2007 con una plantilla récord de 248.487 empleados, de los que casi la mitad trabajan en Atento, el negocio de contact center o teleservicios. La memoria también indica que Ernst & Young cobró 23,8 millones por auditoría y otros servicios (23,5 millones en 2006). La factura de otros auditores cayó un 44% hasta 18,3 millones. Las inversiones, como dijo la empresa al presentar resultados, fueron de 8.027 millones (+0,3%).