La huelga de autobuses encara su tercera semana

Barcelona y Valencia sufren también paros por la negociación del convenio

09 mar 2008 - 00:00CET

Los 7.700 trabajadores piden a la EMT un plus mensual de 180 euros, una paga anual de 500 euros y paradas de 30 minutos cada ocho horas. La dirección de la EMT estima que las peticiones de los sindicatos suponen un incremento salarial del 29%, algo que "está muy lejos" del acuerdo. "Lo más adecuado es que los sindicatos aplacen las movilizaciones sin fecha para que así podamos negociar", sostiene el gerente de la EMT, Javier Conde.

La falta de acuerdo en la negociación del convenio colectivo entre las empresas municipales de transportes y los trabajadores se repite también estos días en Barcelona y Valencia. En la provincia catalana, los trabajadores de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) convocaron la huelga el pasado mes de noviembre. Desde entonces, han protagonizado 14 paros y multitud de manifestaciones en la calle. Los sindicatos, sin embargo, reconocen que se encuentran "en el ecuador del conflicto, cerca de llegar al final", según ha explicado Saturnino Mercader, presidente del Comité de Empresa.

Una situación peor se vive en Valencia, donde además de la huelga de autobuses se da la de los maquinistas del metro. Es previsible que los valencianos tengan que pasar las Fallas sin poder desplazarse en transporte público. Página 2

Suspendido el paro de limpieza

Unos 800 trabajadores reunidos ayer en asamblea decidieron suspender cautelarmente la huelga del sector de la limpieza de edificios y locales, que empezó el martes pasado. "No queremos que nos acusen de buscar protagonismo cuando ha habido un acto terrorista como el de ETA", explicó ayer Isabel Rodríguez, secretaria general de Actividades Diversas de CC OO, el sindicato convocante del paro. No hay una fecha prevista para retomar las movilizaciones. Pero "vamos a seguir luchando el mismo lunes", aseguró.

Las 65.000 personas aproximadamente que trabajan en el sector de la limpieza fueron llamadas a la huelga indefinida tras la negociación frustrada del convenio colectivo. La reclamación principal del sindicato es que los sueldos, de una media de 700 euros, alcancen los 1.000. Para ello exigen una subida del 13%. La patronal (Aelma) ha puesto el techo en un 4,5%. La mesa negociadora se ha sentado dos veces desde que empezó la huelga, las dos sin grandes avances.

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