Un ex diputado foral ayuda a esclarecer datos del 'caso Irún'
La declaración del ex subdirector de Recaudación de la Hacienda de Guipúzcoa entre 1997 y 2003, Peru Bazako, en la comisión de las Juntas Generales que investiga las responsabilidades políticas que pueden derivarse del fraude de la oficina de Irun "ha sido interesante para el esclarecimiento de los hechos", afirmó ayer el presidente de esta comisión, Julio Astudillo (PSE).
Bazako, diputado foral para la Calidad en la Administración durante la pasada legislatura, rehusó hacer comentarios a los periodistas al abandonar la comisión por tratarse de una comparecencia "secreta". "No quiero desvelar nada", dijo el ex subdirector de Recaudación, que ocupó ese cargo durante un periodo en que el principal imputado del caso, José María Bravo, era responsable de la oficina tributaria de Irún.
Astudillo explicó que el ex diputado colaboró con los miembros de la Cámara foral y, aunque no aportó "datos nuevos", su intervención sí sirvió para "interpretar" los que ya se tienen y para poder hacer "una composición de lugar cada vez más avanzada". Tras la declaración de Bazako, los miembros de la comisión interpelaron a Andrés Gómez Garrido, que le sucedió a aquél en 2003 y continúa en ese cargo.
Astudillo indicó que la intención de la comisión es "recuperar el tiempo perdido" y atender siete comparecencias los días 13 y 14 de marzo, en principio de representantes sindicales y del personal del Servicio de Auditoría del departamento de Hacienda. Agregó el presidente que, "si los trabajos de la comisión de investigación van como hasta ahora", espera que puedan tener listas sus conclusiones el próximo noviembre, un mes antes de la fecha fijada para dar por cerrada la investigación.
