En busca del modelo

Coger lo mejor de las grandes superficies y llevarlo al centro de las ciudades. Ese parece el mensaje que todas las asociaciones dinamizadoras del pequeño comercio quieren difundir en el seno de sus asociados. Gasteiz On, Donosti Shops, y Bilbo Dendak saben que el futuro está en adaptarse a ese nuevo consumidor que ha sucumbido a los encantos del centro comercial del extraradio de las ciudades.

Un tipo de usuario que quiere mezclar compras y ocio, y que busca que le sorprendan. Quizás porque valora mucho el escaso tiempo del que dispone el consumidor medio actual es más consciente de lo que compra, y busca una buena relación calidad-precio.

El nuevo perfil del consumidor lo explotan las grandes superficies a la perfección, ofreciendo espectáculo empezando por la propia arquitectura de los centros. Saben que se enfrentan a una persona que hace la compra una vez cada 20 días de media, y no le pueden decepcionar. Un tipo de comprador que congela los alimentos, solicita el servicio a domicilio, pide una pizza el viernes por la noche y compra casi toda la ropa y los elementos de decoración en un centro comercial.

El Corte Inglés en Bilbao aglutina a su alrededor un numeroso comercio

Los especialistas en dinamizar los centros urbanos cuentan cada vez más con la complicidad de los ayuntamientos, en busca de esa combinación entre capital privado y empuje público que, con más inversiones, permita reinventar los centros de las ciudades. Ya están escrutando nuevos modelos.En el caso de Vitoria, el pequeño comercio no cree que el modelo a aplicar sea el de Lakua Centro. Un centro comercial muy cómodo, con aparcamiento gratuito que levanto Sacyr Vallehermoso en 2001 en una nueva zona de desarrollo de la ciudad, y que hace unas semanas vendió a la promotora madrileña Sotohenar por 19,5 millones, 1,5 menos que lo que en su día declaró que había invertido. Un centro que no atraviesa un buen momento, al tener cerradas sus nueve salas de cine cerradas, y tres de los 35 locales comerciales. El auténtico motor es el Boulevard, y el que más tensión está generando con el centro urbano.

En Bilbao, el caso más relevante es el del Corte Inglés, un auténtico polo de desarrollo que aglutina a su alrededor a numeroso comercio. "Pero hay que trabajar más los cascos históricos, y quizás hay que ofrecer más servicios", reconoce el gerente de la patronal Cecovi.

El problema de transformar los centros para ofrecer ocio y comercio es un problema asociado a las infraestructuras. Son necesarias plazas de aparcamiento e implicar a empresarios de hostelería. Eso es lo realmente complicado "En un centro comercial hay un gerente y el suelo es suyo. Reordena y ejecuta. Entre los dos verbos puede haber un retraso como mucho una semana", dicen desde Anged, mostrando la flexibilidad de su modelo. En los centros de las ciudades quizás habría que trabajar para especializar los espacios públicos con actividades culturales, dicen desde el Ayuntamiento de Vitoria.

El Gobierno cree que es inteligente para los propios inversores reorientar sus inversiones hacia el centro, y buscar modelos de convivencia entre el gran empresario y el pequeño comerciante, sobre todo a la vista de que hay experiencias que ya están dando pistas de reactivación comercial y de éxito de ventas. En Rentería está el caso del centro Niessen, y en Irún la renovación del viejo Mercado Municipal en el Parque Comercial Mendibil. El mercado de San Martín en San Sebastián es otra.