"No tengo ni idea, pero seguro que lo comparto"

La mayoría de pacientes y sus familiares consultados ayer en el Hospital de Cruces, en Barakaldo, desconocían los motivos de la huelga y la marcha de las negociaciones y no se atrevían a opinar sobre la gestión que Sanidad está haciendo del conflicto. Sin embargo, muchos manifestaban que "si protestan por algo será". "No tengo ni idea, pero seguro que es una reivindicación que comparto", decía una señora que acompañaba a su madre a una consulta en Oftalmología. "¡Que pidan, que metan caña!", exclamaba una pareja joven al salir de Cuidados Intensivos. Un interno dejaba clara su desconexión de la actualidad: "No he leído ni oído nada. No me he enterado ni de lo de Fidel".

La huelga apenas se notó en las plantas del mayor hospital vasco, salvo para quienes esperaban someterse a una operación. "Llevamos horas esperando y vemos que a mucha gente les han mandado a casa por la falta de celadores", lamentaban Josune y su amiga Julene, quienes siguen el conflicto con atención: "Hay saturación, falta de personal, cuestiones salariales... Enfermería ha conseguido un acuerdo y los otros no, así que se ve que Sanidad no está negociando bien con todos. Y los gestores están perjudicando el servicio para que la gente se eche a la cabeza de los huelguistas", destacaban.

Begoña, acompañante de un ingresado, criticaba que los huelguistas se manifestasen por los pasillos "molestando a los pacientes". "Que vayan a Lakua a quejarse, o al despacho de Inclán", exigía irritada. No cree que el salario sea el motivo del paro: "Ya se sabe que el personal sanitario tiene buen sueldo".

La convocatoria se dejó sentir menos que la de enero en los centros de salud bilbaínos. Habituales del ambulatorio de San Ignacio destacaron la buena atención y la falta de incidentes. "No sé porqué hacen huelga, pero viendo a Inclán en la tele no me cabe duda de que es un prepotente", decía una joven.