Monotonía en el gran pimpón chino
China tiene una potente presencia, y se hace notar en el espacio dedicado a los creadores emergentes. Una de las obras más espectaculares es una gigantesca instalación hecha con cartón y recubierta con acero por Li Songsong (Beijing, 1973). En la obra que se expone en Madrid, dos hombres juegan al pimpón mientras se escuchan una y otra vez los botes de la pelota y los bufidos de los deportistas durante el partido. La presencia de los espectadores se refleja sobre los jugadores como si estuvieran delante de un espejo. La monotonía es el tema de esta obra que se puede adquirir por 300.000 euros. Del mismo artista se expone otra pieza de gran tamaño y el mismo material, El marginado, una metáfora sobre la soledad que denuncia el aislamiento del hombre. Su precio es de 200.000 euros.
Babelia
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