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"La gente de mi edad lo tiene crudo"

El paro crece en 17.557 personas en enero, la segunda mayor subida de España

"La gente así de mi edad lo tiene muy crudo. Crudo no, casi imposible", dice, a la puerta del Servef (el Inem autonómico) del muy obrero barrio valenciano de Torrefiel, Luis Arteaga, de 55 años. "En la construcción siempre ha habido estos baches. Yo he estado una semana o dos parado, siempre luchando, pero ahora llevo tres meses y no va a mejorar, porque cada vez hay más gente y menos fincas". La de Arteaga es una de las caras que se esconden tras las estadísticas que dicen que la valenciana fue la segunda comunidad autónoma donde más creció el paro en 2007: las oficinas de empleo registraron 20.000 parados más que en el último trimestre de 2006 (un aumento del 9,85%). Y que enero tampoco fue mejor: en un mes, 17.557 valencianos engrosaron la lista, hasta alcanzar los 233.250 desempleados.

El aumento del paro en enero afectó a todos los sectores
"Por 900 euros brutos al mes, yo ni me levanto de la cama"

El mal comportamiento del empleo en enero lo saben de primera mano en la oficina del Servef de la calle de Luís Felipe Rinaldi, paralela a la del Conde de Torrefiel, en Valencia. Se nota por el aumento de público y por el ir y venir al armario para renovar el montón de solicitudes de prestación por desempleo. A la puerta de la delegación, las estadísticas van tomando cuerpo: se ven sobre todo mujeres, inmigrantes y, en este barrio, trabajadores de la construcción. Un sector en el que el paro se incrementó en enero un 6,57% respecto a diciembre pero un 44,53% respecto a enero del año anterior.

"Yo tengo la suerte", dice Arteaga con gesto cansado y un acento que a pesar de los años sigue siendo granadino, "de que el piso es mío, si no estaría durmiendo debajo de un puente. Si de los 600 euros que me dan de paro tuviera que pagar 300 o 400 de alquiler, con 200 euros mi mujer y yo no podríamos ni comer".La oficina de Torrefiel está situada junto a un bar, y alguno de los desempleados que acude al Servef se detiene a saludar al grupo de vecinos que pasa el mediodía en la única mesa de la terraza en la que da el sol. La mayoría, sin embargo, entra y sale con prisa, pocos quieren hablar y casi todos llevan en la mano una carpeta o los folios con las ofertas de empleo.

Arteaga se lamenta de que esas ofertas suelen dejarle fuera de entrada, por razón de edad. El caso de Eva, una joven de 31 años, casada, sin hijos, con una hipoteca de 400 o 500 euros al mes ("depende de cómo esté el Euribor"), es diferente. Ella, que lleva un año en paro, ha recibido ofertas, pero las ha rechazado: "Todos los trabajos que me han ofrecido son chapuceros. Pagan muy poco y encima tienes que tener mucha experiencia. 800, 900 euros brutos como mucho, y yo por 900 euros no me levanto ni de la cama".

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Eva, administrativa, graduada de ciclo superior de Formación Profesional, trabajó cinco años en una empresa de construcción que le pagaba 1.200 euros netos al mes. "Al principio", explica, "éramos 36 trabajadores, luego fue bajando hasta que se quedó con seis, y con seis cerró. Al final estaba sola en la oficina, porque sin mí no podían hacer nada". De momento, ella y su marido, albañil, de baja por un accidente no laboral, viven del colchón económico del subsidio de desempleo. Hasta diciembre, si no la cogen en algún trabajo que la convenza, percibirá 800 euros al mes.

Sin llegar a las tasas de otras épocas, el desempleo en la Comunidad Valenciana alcanzó el mes pasado cotas preocupantes. En relación con enero de 2007, el aumento del paro se disparó el 16,29% (cuando la media interanual en España fue casi la mitad: el 8,62%).

Esas cifras hicieron saltar a su vez las alarmas en los sindicatos (Comisiones Obreras llegó a calificar de "agonizante" el modelo económico valenciano). Llevaron a la patronal a combinar mensajes de tranquilidad con otros de inquietud ("las expectativas sobre empleo e inversión se han deteriorado sensiblemente", afirmaba la Confederación Empresarial Valenciana a finales de la semana pasada). Y forzaron al Consell a reactivar el diálogo social, que llevaba tiempo aparcado, a la vez que atribuía la responsabilidad de los datos a la "ausencia de políticas económicas" del Gobierno. Ello, según el vicepresidente económico Gerardo Camps, ha traído consigo el incremento del paro y una desaceleración en el conjunto de sectores.

La secretaria de Economía del PSOE, Inmaculada Rodríguez-Piñero, recordó por su parte que las competencias de empleo están transferidas a las comunidades autónomas. Y circunscribió el crecimiento del desempleo a un efecto de la excesiva dependencia del sector de la construcción en el modelo de crecimiento de la economía valenciana.

Ningún sector se salvó en enero del zarpazo del paro. En total, la agricultura tiene ya 5.034 desempleados, un 34% más que el mes anterior y un 38,38% en términos interanuales. En la industria, con un incremento del 2,94% respecto a diciembre y un 4,07% interanual, la lista de parados asciende a 45.217. El sector de los servicios, el más perjudicado por el final de la campaña navideña, registró el pasado mes 12.289 parados más (138.609 en total), un aumento del 9,73% y el 16,56% interanual. La tasa se incrementó igualmente, por último, en el colectivo sin empleo anterior en términos mensuales (8,26%) e interanuales (4,51%).

Todo ello revela para UGT la necesidad de modificar las bases del crecimiento económico y de rediseñar las políticas de inversión. Desde su punto de vista se impone una diversificación del tejido productivo, dando prioridad a las actividades industriales y de mayor valor añadido que generan empleo estable. CC OO, además de considerar que el actual modelo se encuentra en fase terminal y que la construcción ha pasado de ser un sector estratégico a ser "un nicho de empleo", reclama medidas que impliquen un cambio económico para generar más empleo de calidad. Con especial dedicación a los sectores de mayor valor añadido.

Todo eso parece, por ahora, lejos de la oficina de Luis Felipe Rinaldi, de donde Ichan, de 28 años, y Rachid, de 33, salen empujando el carrito de uno de sus dos hijos. El matrimonio marroquí, nacido en Kenitra, al norte de Rabat, y residente desde hace cinco años en España, aunque su castellano parezca desmentirlo, va tirando con los 750 euros que recibe Rachid. Su último trabajo en diciembre de 2007 consistió en construir una piscina en Albalat. El último empleo de Ichan, que es la que habla por los dos, fue de empaquetadora en una empresa de frutas. Está a la espera de que le contesten la solicitud de prestación. "Si no llega por lo menos la ayuda para los chiquillos, vamos muy mal. Y como todo ha subido, la paga es menos", cuenta.

Luis Arteaga también se refiere, sin citarla, a la inflación cuando habla de lo que hace unos años significaban "100.000 pesetas". "Ahora la mayoría de la gente estamos viviendo de la apariencia, nada más. Porque una persona con 600 euros no puede llevar una casa, haga lo que haga. Pides prestados 3.000 euros, luego otros 3.000 euros...".

Una oficina de empleo del Servef ayer en Valencia.
Una oficina de empleo del Servef ayer en Valencia.SANTIAGO CARREGUÍ

Las cifras del desempleo

- El paro afecta a 233.250 valencianos, según los últimos datos, correspondientes a enero, un mes en el que se registraron 17.557 desempleados más.

- La comunidad valenciana fue el segundo territorio de españa donde más creció el paro en 2007.

- El crecimiento en enero respecto a diciembre fue del 8,14%, pero respecto al mismo mes del año anterior fue del 16,29%, casi el doble que la media de españa.

- La construcción fue el sector más castigado. En enero, el aumento respecto al mismo mes de 2007 fue del 44,53%.

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