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Reportaje:

El adiós de Mama África

Miriam Makeba se despide hoy de los escenarios españoles

Se va. Mama África se está yendo. Sin prisas, pero también sin pausas, la mítica cantante surafricana Miriam Makeba, de 75 años, se está despidiendo de los escenarios de todo el mundo.

Empezó su Farewell tour el año pasado en su ciudad natal, Johanesburgo, y dirá esta noche su adiós a los escenarios españoles en Barcelona, con un concierto en el Palau de la Música Catalana incluido en la programación del Festival de Milenio. ¿El día que definitivamente dejará de cantar? Todavía no ha podido poner fecha. "Intento decir adiós desde hace un año, pero me está costando. Cada vez que llego a casa, alguien me pide que dé un concierto más. Y la verdad es que ya no soy joven. Llevo 50 años sobre el escenario y viajar me cansa mucho. ¿Que qué haré? Me dedicaré al hogar para niñas que tengo en Suráfrica. Ellas son el futuro de mi país".

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La vieja Makeba, como ella se presenta, parecía ayer cansada. Su franca y abierta sonrisa de otros tiempos apenas era un leve esbozo que parecía disimular cansancio y dolor -andaba con dificultad apoyada con una muleta-. Pero pese a los años y los achaques, Mama África no ha perdido ni un ápice del carisma que convirtió su voz en sinónimo de la libertad africana. Fue, y lo sigue siendo, una incansable guerrera por la paz y contra el racismo. Ese racismo que en 1960 le costó un exilio forzoso de 31 años al prohibirle el régimen surafricano del apartheid la entrada a su país tras una gira.

"Nunca he olvidado de dónde vengo. Desde joven tuve la determinación de no mirar nunca atrás. Nosotros, los surafricanos, fuimos los últimos en conseguir la libertad en África. Luchamos contra un régimen de apartheid y lo conseguimos. Ahora somos libres, pero nuestra libertad es relativa, porque económicamente hay mucha represión. Y mi lucha nunca terminará hasta que todos seamos realmente libres".

Su compromiso con la libertad del país que la vio nacer y, por extensión, de todo el continente africano alimenta a Miriam Makeba. Ayer por la tarde, recibió en Mataró (Barcelona) el Premio por la Paz 2007 que concede desde hace 28 años la asociación para las Naciones Unidas en España. Premio que le ha sido concedido por su defensa de las libertades y la igualdad.

Esta noche, sobre el escenario del Palau de la Música de Barcelona, le cantará a África y a la libertad, porque dice que "cantar hace feliz". En el repertorio, viejas canciones, entre las que no faltará su célebre Pata pata, y nuevos temas de su último disco, el 31º de su dilatada carrera. Ayer, como aperitivo, sorprendió a los periodistas al cantarles al final de su encuentro, a cappella y con una lágrima surcando su mejilla izquierda, su triste y bella balada Oh, so alone.

Miriam Makeba, ayer en Barcelona.
Miriam Makeba, ayer en Barcelona.TEJEDERAS

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