Tarragona convertirá un sanatorio en espacio cultural

El antiguo complejo de edificios de La Savinosa, en Tarragona, que se encuentra deshabitado y en ruinas pese a estar ubicado en un enclave paradisiaco, al borde mismo de la playa, se convertirá en la Universidad Internacional del Mediterráneo, donde se impartirán conferencias y cursos de posgrado, siguiendo el modelo del palacio de la Magdalena, en Santander.

El complejo fue construido en 1929 como hospital para tuberculosos

La Savinosa acogerá la Universidad Internacional del Mediterráneo

El proyecto del Ayuntamiento de Tarragona pretende implicar a todas las administraciones: la Diputación, actual propietaria del conjunto; la Generalitat de Cataluña, la Universitat Rovira i Virgili (URV), e incluso la Unión Europea (UE), que ya ha expresado su simpatía por el plan, según manifestó el alcalde de la ciudad, el socialista Josep Félix Ballesteros. El complejo fue construido en 1929 como sanatorio para tuberculosos y posteriormente actuó como reformatorio. A finales de los setenta, quedó deshabitado.

Ballesteros expresó su intención de que a lo largo de este mismo año estén ya comprometidas las administraciones y entidades que actuarán como socios del proyecto cultural. El primer paso será la cesión de la propiedad por parte de la Diputación al Ayuntamiento.

La Universidad Internacional del Mediterráneo será un edificio de nueva construcción, ya que el inmueble que albergó el antiguo sanatorio no ha sido incluido en el catálogo de interés cultural y, por tanto, pueden ser derruidos. No obstante, es probable que se deje en pie algún bloque como testigo del pasado. A lo que sí se comprometió el alcalde es a no aumentar el volumen constructivo actual.

El antiguo sanatorio está formado por un gran edificio central de unos 2.500 metros cuadrados, que era utilizado como centro hospitalario, y varios adyacentes más pequeños en los que se alojaban los enfermos. En total, el volumen construido es de unos 3.500 metros cuadrados, enclavados en una parcela de terreno de aproximadamente media hectárea.

Los bloques tienen una altura de entre dos y cuatro plantas y están dispuestos entre elementos urbanos, a modo de pequeñas plazas y paseos integrados en una gran zona verde, que el alcalde Ballesteros se comprometió a mantener en su integridad. Además, el proyecto incluirá un paseo marítimo para enlazar las playas de La Savinosa y L'Arrabassada (hacia el norte de la ciudad).

La reutilización del espacio es uno de los asuntos eternamente pendientes de la ciudad y ya hace tres años que la Universidad Rovira i Virgili elaboró un presupuesto para su ejecución, que cifró en unos 40 millones de euros. Ballesteros calcula que ese coste se puede mantener prácticamente invariable.

El proyecto de La Savinosa está integrado en un amplio plan de equipamientos culturales que el PSC, antes en la oposición, reclamaba al anterior equipo de Gobierno (CiU-PP), al que acusaba de actuar "a salto de mata" a la hora de reutilizar un patrimonio inmobiliario muy importante formado por edificios monumentales en desuso, que, por distintos motivos, pasarán a ser propiedad del Ayuntamiento.

La concejal de Patrimonio, Rosa Rosell, ha recibido el encargo de inventariar las necesidades culturales de la ciudad para establecer cuáles pueden desarrollarse en alguno de estos edificios y las que necesitan uno de nueva construcción. Forman parte de ese patrimonio el antiguo Banco de España, la Tabacalera y la fábrica de la Chartreuse.

La empresa Altadis y el Ayuntamiento firmaron el pasado viernes, día 4, el acuerdo por el cual la antigua fábrica de tabaco pasará a ser propiedad municipal. El edificio monumental, de estilo neoclásico, acogerá el Museo Arqueológico porque el actual se ha quedado pequeño. También, el Banco de España, que era propiedad del Estado, se convertirá en una biblioteca-hemeroteca de cuestiones municipales y en archivo local. Acogerá, además, un centro de información turística aprovechando la ubicación del inmueble, en plena Rambla Nova.

Otro proyecto ya definido es la construcción un gran auditorio de música, para el que se levantará un edificio de nueva planta a las afueras de Tarragona, en la zona de lEvante. Estará rodeado de una zona verde y un aparcamiento disuasorio para evitar en lo posible la entrada de coches al centro de la ciudad.