Entre el optimismo y la reivindicación
Amigos del País, presidida por Roca, aboga por huir del derrotismo, mientras que un centenar de entidades exigen la descentralización de El Prat
La sociedad civil sigue atenta al hartazgo de los ciudadanos por el caos energético, ferroviario y aeroportuario que se han ido encadenando en el último año. A los pronunciamientos que ya han realizado varias organizaciones económicas, este fin de semana se ha añadido un discurso más alentador y optimista de la Sociedad Económica Barcelonesa de Amigos del País (SEBAP), presidida por Miquel Roca. Y también un centenar de entidades sociales y económicas han difundido un manifiesto en el que reivindican "una gestión descentralizada del aeropuerto de Barcelona".
La SEBAP, integrada por miembros destacados de la sociedad económica, social y cultural, considera que Cataluña vive con un "desconcierto" que debe afrontarse huyendo de cualquier derrotismo o victimismo. La fórmula que propone la SEBAP se resume en agarrar el toro por los cuernos porque, en opinión de Roca, "hay suficiente capital humano, social y ético" para superar esta situación. Y de ello dan fe, razona, la cantidad de licenciados, diplomados e investigadores, además de la "fuerza institucional" de Cataluña.
Roca pide apostar por el capital humano y la calidad educativa
La hoja de ruta que propone la entidad presidida por Roca empieza por la política educativa, una de las asignaturas pendientes de Cataluña, de acuerdo con los informes que se han ido publicando en las últimas semanas. El informe elaborado por la SEBAP propone "apostar por la calidad educativa" y recuperar valores como "el esfuerzo, la constancia, la disciplina y el trabajo bien hecho".
El texto también recomienda acoger la diversidad que aporta la inmigración "preservando la identidad catalana"; reequilibrar "los valores colectivos e individuales" y desarrollar una sociedad civil dinámica. El grupo reclama a los políticos que recuperen un espíritu de consenso para alcanzar proyectos ambiciosos que devuelvan la ilusión al ciudadano. Pero para ello, advirtió Roca, se requieren liderazgos fuertes y plurales.
Los empresarios catalanes han manifestado en varias ocasiones su preocupación por las inversiones en infraestructuras. Las reivindicaciones arrancaron con el insólito acto en marzo en el IESE, que reunió a un millar de personas de negocios para reivindicar un aeropuerto de Barcelona de primera categoría. Desde entonces, Fomento del Trabajo, el Círculo de Economía y la Cámara de Comercio se han pronunciado sobre la falta de inversiones o de proyectos de mayor envergadura.
Ayer, un centenar de empresas y entidades sociales volvieron a reclamar la descentralización del aeropuerto de Barcelona para que su gestión sea "eficiente, moderna y profesional". "Queremos el aeropuerto que merecemos y esto pasa, indefectiblemente, por la participación de Cataluña en su gestión", remacha el texto que firman, entre otros, 11 cámaras de comercio, 9 colegios profesionales, una decena de centros universitarios y entidades como el CECOT y el FC Barcelona.
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