Jóvenes investigadores reclaman la mejora de su situación laboral

Los científicos protestan hoy ante el Parlamento contra la precariedad

Cádiz - 14 dic 2007 - 00:00CET

Los científicos de Andalucía están llamados hoy a la movilización. Una protesta ante el Parlamento autonómico servirá para criticar la recién aprobada ley andaluza de la Ciencia y el Conocimiento que, según denuncia la Federación de Jóvenes Investigadores (FJI), mantiene sus condiciones precarias puesto que sigue sin sustituir definitivamente las becas por contratos ni eliminar las etapas muertas en la que los profesionales de la ciencia se quedan en el paro.

Andalucía fue pionera en implantar el sistema 2+2, que incluye dos años de beca y dos años de contrato durante el tiempo de preparación de la tesis. Ahora ya ha quedado atrás de otras comunidades como Cataluña que tiene el 1+3 o Madrid, que ya ha conseguido el 0+4.

La FJI exige poder cotizar desde el primer día para así poder acceder a prestaciones por desempleo o permisos de maternidad desde el principio. Aunque la principal reclamación ahora es que se aprueben fórmulas que reduzcan la incertidumbre de los que finalizan sus tesis y se encuentran ante un abismo laboral sin ninguna garantía de futuro.

Enmiendas

La Federación lamenta que el PSOE rechazara en la Cámara andaluza las enmiendas de la oposición para incluir en la ley programas de perfeccionamiento y retorno. Estos planes permitirían la salida de los investigadores andaluces para trabajar en centros de investigación de prestigio en España o el extranjero y su posterior reincorporación al sistema de investigación de Andalucía a su regreso.

Estas medidas garantizarían la estabilidad de los investigadores, al menos, durante 11 años. "Se ha empezado a regular la fase predoctoral pero no hay un itinerario definido una vez has terminado la tesis", se queja el vicepresidente de la FJI, José Die.

Los miembros de la Federación insisten en que no son estudiantes, sino trabajadores. Reconocen el carácter vocacional de su labor pero no quieren que eso sirva de excusa para avalar su precariedad. Por eso lamentan la oportunidad perdida con la nueva ley que regula la actividad científica.

La protesta de hoy, convocada a las 12.45 frente a la Cámara andaluza, reivindicará medidas urgentes para frenar su precariedad. El lema, Por la dignidad de la investigación, no a la fuga de cerebros.

Rocío Fernández cobra 300 euros por una sustitución parcial

"Genero la misma productividad que un empleado en una fábrica". Rocío Fernández, de 28 años, defiende desde el laboratorio donde está realizando una sustitución parcial en la Facultad de Farmacia de Sevilla los derechos laborales que nunca ha tenido. El primero, un contrato desde el primer día de trabajo. "Mi investigación le sirve a mis superiores. Y eso es trabajar", insiste. Su labor se ha centrado en la vegetación de humedales en el parque nacional de Doñana.

José Die gana 1.300 euros

Compatibiliza su trabajo como ingeniero agrónomo del IFAPA de Córdoba con su labor en la defensa de los científicos como él en la vicepresidencia de la Federación de Jóvenes Investigadores. Tiene 32 años y va a iniciar su segundo año de contrato para que pueda terminar sus tesis sobre los mecanismos de las plantas para defenderse de otras plantas. Cuando acabe, no sabe qué será de su futuro. "Después de la tesis, todo es incertidumbre", explica. Pide para él la estabilidad que desea para todos sus compañeros.

María Paz García, sin sueldo

Dentro de cuatro meses tendrá a su hija, aunque durante toda su carrera como investigadora nunca habría tenido derecho a solicitar permiso de maternidad. Tampoco indemnización por desempleo. Ni ha podido ir a un banco para reclamar una hipoteca. Tiene 29 años y confía todavía en poder vivir de su trabajo científico. "Es muy vocacional, pero todos tenemos que salir adelante". En su tesis, que ahora concluye sin remuneración, investiga en la Facultad de Ciencias del Mar de Cádiz sobre plantas marinas que sólo se dan en áreas sin contaminación.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Añadir usuario Continuar leyendo aquí

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.