El agua de Barcelona, cuestionada
Salud Pública alerta de que agentes químicos de la corriente del Llobregat son potencialmente cancerígenos - Agbar y la Agencia del Agua subrayan su buen estado
El 8% de los barceloneses, en su mayoría residentes en la zona sur de la ciudad, se abastecen con agua procedente del río Llobregat que, en ocasiones, supera los niveles máximos permitidos de trihalometanos, agentes químicos que, consumidos durante un plazo muy largo -décadas-, pueden tener efectos potencialmente cancerígenos. Así lo expresó ayer el gerente de la Agencia de Salud Pública de Barcelona, Joan Guix. Y saltó la alarma. Aguas de Barcelona y la Agencia Catalana del Agua aseguraron, en sendos comunicados, que el agua de Barcelona tiene todas las garantías de salud.
El límite legal que establece la Unión Europea (UE) de aquel compuesto, que se genera durante el proceso de potabilización al añadir cloro, es de 150 microgramos por litro, pero en algunas zonas de la capital catalana se han detectado hasta 156,6 microgramos por litro en determinados momentos. España tiene hasta 2009 para rebajar esa medida a 100 microgramos por litro. Hasta 2003 no existió legislación que regulara estos agentes.
El director de Salud Pública de la Generalitat, Antoni Plasència, aseguró por la tarde que la población de Barcelona "puede consumir agua todo el año" sin riesgo y dijo que los niveles de trihalometanos, que casi nunca superan el máximo permitido, son resultado de los procesos de desinfección. Plasència destacó que cuando se superan estos niveles "se actúa en consecuencia" y se limita su presencia.
En su comunicado, Aguas de Barcelona informa de que se están construyendo nuevas infraestructuras como la desaladora de El Prat, que entrará en funcionamiento en 2009. "Aguas de Barcelona quiere transmitir un mensaje de absoluta tranquilidad a los ciudadanos que consumen el agua y lamenta la preocupación que puede haber generado una información incompleta y alarmista", explican.
La Agencia Catalana del Agua también informa de que se están tomando medidas para reducir la generación de trihalometanos en las plantas de tratamiento de Abrera y Sant Joan Despí.
La Agencia de Salud Pública de Barcelona realizó en 2006 un total de 276 controles, de los que 14 no se ajustaron a los valores establecidos. "Toda la costa mediterránea tiene los niveles de trihalometanos más altos de la Unión Europea. En los estudios realizados encontramos una asociación entre estos niveles y el cáncer de vejiga urinaria. Ahora preparamos otro estudio sobre su relación con el cáncer de colón financiado por la Unión Europea", explica Manolis Kogevinas, investigador del Instituto Municipal de Investigación Médica y codirector del Centro de Investigación en Epidemiología Ambiental (Creal).
Kogevinas aclara que ni la UE ni la Organización Mundial de la Salud (OMS) evalúan estos agentes como cancerígenos, cuya exposición no es a través del agua que bebemos, sino por inhalación y por la absorción de la piel cuando nos duchamos. Este investigador invita a los organismos competentes a rebajar los niveles de trihalometanos. "El agua que bebemos en Barcelona no es de buena calidad, como sucede en toda la costa mediterránea, porque los ríos están muy contaminados", afirma.
Los barrios en los que se ha superado este nivel son los situados en el área sur de Barcelona, en Ciutat Vella, Sants-Montjuïc y Les Corts; es decir, los que se abastecen del Llobregat. En la actualidad, el 54% de los barceloneses aseguran que beben agua embotellada, a tenor de datos de la Agencia de Salud Pública, principalmente por el mal sabor que dicen que tiene el agua corriente, aunque muchos otros por el recelo que les causa beber agua del grifo.
La salud en Barcelona (año 2006)
- La población es de 1.605.602 personas; el 52,5%, mujeres. 12.000 mujeres mayores de 85 años viven solas.
- El 69,3% de la población usa los servicios de atención primaria.
- 14.710 nacimientos en 2005.
- La mortalidad es mayor en la población sin estudios.
- El número más elevado de urgencias por drogas las ocasiona la cocaína: 2.121 urgencias.
- Disminuyen los casos de tuberculosis: 451 casos en 2006; el 56% corresponde a españoles.
- Aumenta el número de muertos por accidente laboral: 19 lesiones mortales más que en 2005.
- La esperanza de vida es de 77 años en los hombres y de 83,9 años en las mujeres.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.