_
_
_
_
_

Manos Unidas y el Consell actúan contra la sed en Brasil

El consejero de Inmigración y Ciudadanía de la Generalitat, Rafael Blasco, y la presidenta nacional de Manos Unidas, Begoña de Burgos, firmaron ayer un convenio de colaboración para la puesta en marcha de un plan a largo plazo para la mejora de las condiciones sociales, económicas y ambientales de las personas y familias que se encuentran en comunidades rurales del semiárido brasileño en los estados de Pernambuco y Paraíba, lo que favorecerá a 35.000 personas.

El Consell aportará a este plan un millón de euros, cantidad que permitirá desarrollar una serie de actividades que "mejorarán sustancialmente la calidad de vida de los habitantes de dichas zonas". Para Blasco, el acceso al agua "es un derecho humano" porque "el agua es salud, es fundamental para alcanzar la seguridad alimentaria, es desarrollo productivo, es habitabilidad digna y es un recurso natural cuya preservación es imprescindible".

Las dos zonas incluidas (más o menos dos veces España) constituyen una de las regiones más secas de Brasil. La disponibilidad de agua potable es limitada, la población con acceso al agua potable es de un 25% y la subsistencia alimentaria es difícil. Además, la falta de acceso a procesos formativos contribuye a aumentar las enfermedades entre la población, principalmente la mortalidad infantil. Según la Generalitat, esto ha supuesto que durante muchos años la "única opción" fuera emigrar a las grandes ciudades y vivir en condiciones precarias.

A través de las actividades que se desarrollarán se prevé el acceso, control y manejo del agua por parte de las familias para el consumo humano y para la producción gracias a 150 cisternas que captarán el agua de la lluvia.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_