21 muertos en República Dominicana por el paso de una tormenta tropical

La tormenta tropical Noel ha causado 21 muertos a su paso por República Dominicana. La ciudad más afectada ha sido San Cristóbal, al suroeste del país, donde han fallecido diez personas y hay otras veinte desaparecidas, según confirmó el gobernador de esa provincia, Orlando Espinosa. En San José de Ocoa, también en el sureste del país, murieron cinco personas, y otras dos en Bonao, al norte. Estas dos zonas permanecían ayer incomunicadas e inundadas.

Las lluvias de estos días han provocado la evacuación de 3.295 vecinos en todo el país, y han afectado a 659 viviendas, según valoró ayer la Comisión de Emergencias del país. Los vuelos a los diferentes aeropuertos del país han sido reanudados, después de que se suspendieran ayer por la mañana.

El director de Defensa Civil informó, citado por la agencia Europa Press, de que la autopista que une Maimón y Bonao está obstruida por la crecida de los ríos. Las principales carreteras que unen las regiones de Cibao, Sur y Este se estaban desescombrando ayer. Gran parte de los puentes están destruidos, aislando poblaciones enteras.

El Servicio Nacional de Meteorología pronosticó que las lluvias se van a mantener hasta dentro de dos días. Ayer el viento alcanzó una velocidad de 85 kilómetros por hora, tal y como registró el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, en Miami, y anunció que en 24 horas la tormenta se va a fortalecer. La previsión es que, en las próximas horas, la tormenta alcance Cuba, sobre todo la zona centro y sureste, en las provincias de Camagüey las Tunas, hacia adonde avanza a 24 kilómetros por hora. En Bahamas también se preparan para recibir la tormenta, en el sureste, y también en Puerto Rico.

La semana pasada una lluvia torrencial -ésta es la época de huracanes, que termina el 30 de noviembre- causó inundaciones en Haití, con 20 personas muertas en la ciudad de Cabaret y centenares de personas evacuadas de sus casas.

Por otra parte, las intensas lluvias de los últimos días han dejado unos 100.000 damnificados en el Estado de Tabasco, al sureste de México, informaron ayer fuentes oficiales. Esta situación provocó la suspensión de parte de la producción de las plataformas de Petróleos Mexicanos en el Golfo de México.