Más de 1.800 personas usan la 'narcosala' en cuatro años

La polémica con la que nació la narcosala de Bilbao se ha ido disipando con el paso del tiempo. Y lo que hace cuatro años soliviantó a los vecinos donde se instaló el local, ahora ya no es motivo de queja. La ONG Médicos del Mundo de Euskadi hizo ayer balance de los primeros cuatro años de existencia de la única narcosala que funciona en la comunidad autónoma, destacando que más de 1.800 usuarios han pasado por ella sin que se registren incidentes. La mayor parte de ellos son hombres, un 83,5%.

La iniciativa, que cuando se puso en marcha siguió el ejemplo de capitales como Madrid y Ginebra, pretende, además de crear un espacio de consumo de drogas de manera higiénica, lograr la inserción de los toxicómanos en la red social de asistencia y de atención sanitaria. De esta forma, se abre una puerta a la rehabilitación de los drogadictos. Con esta finalidad, Médicos del Mundo, desarrolla programas de carácter preventivo, de consumo de menos riesgo e intercambio de jeringuillas. El equipo se encarga de las instalaciones está preparada para intervenir en caso de que se produzcan sobredosis.

Desde el año 2003, se han registrado un total de 96.387 consumos de menor riesgo. De éstos, 59.227 se realizaron por vía intravenosa, 27.435 por inhalación y 1.827 esnifando. Con relación al consumo de sustancias, el 47% es de heroína.

Sin alarma social

A pesar de que la heroína es la droga que más temor despierta en la sociedad, "ya no existe alarma social", aseguró ayer la directora de la Unidad de Sistemas de Información y Documentación del Plan Nacional Sobre Drogas, Amparo Sánchez. "Los escenarios de la drogadicción y los problemas asociados a ella han cambiado. El caballo [heroína] ya no está presente en la prensa diaria y ya no es frecuente ver a drogadictos asaltando a ciudadanos, atracando farmacias o tirados en la calle".

Sin embargo, esto no significa que se haya acabado con el problema. En España, existen actualmente cerca de 90.000 heroinómanos. Sánchez, quien participó en una jornada en Bilbao sobre narcosalas, admitió que, por el momento, no se ha logrado integrar a estos drogadictos en un "nuevo modelo social más justo, humano y solidario" que mejore su calidad de vida.

El consejero de Vivienda y Asuntos Sociales, Javier Madrazo, también intervino en la jornada y aprovechó para reiterar la necesidad de poner en marcha un programa de dispensación terapéutica de heroína bajo control médico a los presos drogadictos de la prisión de Nanclares de la Oca (Álava). "Hasta ahora no hemos encontrado receptividad", se lamentó