La policía busca a la ex pareja de una mujer muerta por asfixia

Sara R. A., una mujer de 33 años, falleció el pasado sábado en su habitación, en el barrio sevillano de Bellavista, como consecuencia de una "muerte violenta por sofocación (asfixia)", según consta en la autopsia. El Cuerpo Nacional de Policía no confirmó ayer si se trata de un nuevo caso de violencia machista. No obstante, las fuerzas de seguridad buscan a su ex pareja, que había ido a la capital andaluza para visitarla durante el puente del Pilar. Se trata de un hombre residente en Madrid que, supuestamente, huyó con el coche de la víctima. Sara R. A. no había denunciado nunca malos tratos ni había tenido orden de protección. El presunto asesino tampoco tenía antecedentes, según informó la policía.

En el Instituto Andaluz de la Mujer y en los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Sevilla tendrán que comprobar hoy si la fallecida había acudido a pedir asesoramiento o ayuda. "Todo parece indicar que estamos ante una nueva víctima de la violencia machista; pero hay que esperar a que avance la investigación de la policía y hay que ser cautos", manifestó Ángeles García, la delegada del Instituto Andaluz de la Mujer en la capital andaluza. De confirmarse que estamos ante un caso de violencia de género, Sara R. A. sería la octava mujer muerta por su ex pareja en Andalucía este año y la número 56 en toda España.

La víctima residía en la calle Enamorados, donde compartía piso con una hermana y una amiga, según señaló la policía. La mujer y su ex compañero habían decidido dejar la relación por un tiempo. Sin embargo, seguían viéndose en algunas ocasiones. El pasado sábado, entre las siete y las ocho de la tarde, su hermana decidió entrar en el dormitorio, donde, supuestamente, la víctima había pasado la noche anterior con el huido. Fue cuando la encontró muerta y avisó al 091.

Sin señales de agresión

La autopsia determinó que la mujer había fallecido horas antes. El cuerpo no presenta señales de agresión. Desde entonces, el Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil tratan de localizar al individuo, así como el vehículo de Sara R. A.

Los vecinos de la calle aseguran que conocían poco a las inquilinas de la vivienda donde han ocurrido los hechos. "Llevaban poco tiempo viviendo aquí. Ninguno la conocíamos. Sí sabemos que eran dos hermanas las que paraban allí", comentaba ayer una mujer erigiéndose en portavoz de otros vecinos. "No se oyó nada. Ni golpes, ni gritos ni peleas. Escuchamos una ambulancia y, al momento, estaba aquí la policía. Se formó un revuelo de gente en el callejón, y cada uno decía una cosa", afirmó otro residente en el barrio de la capital sevillana.

El cuerpo de Sara R. A. permanecía anoche en el Instituto Anatómico Forense de Sevilla a la espera de que el juzgado permita su entierro.