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El voto del PP permite al Senado eliminar por completo el carácter militar de la Guardia Civil

Pablo Ximénez de Sandoval

La ley de Régimen Disciplinario y la de Derechos y Deberes de la Guardia Civil pasaron ayer su último trámite en el Senado; y, en el caso de la segunda, sufrió una modificación que elimina por completo el carácter militar del Instituto Armado. Hasta ahora, la ley mantenía bajo la normativa de derechos y libertades de las Fuerzas Armadas a aquellos guardias civiles que se integrasen en unidades militares. Una enmienda de CiU, aprobada con apoyo del PP, suprimió ayer este artículo, por lo que ya no queda vestigio de militarización. Aunque, previsiblemente, esta modificación será deshecha cuando la ley vuelva al Congreso.

El voto a favor del PP pudo deberse a un error, porque, en el turno previo de intervenciones, este partido había defendido la naturaleza militar de la Guardia Civil como parte de su éxito. El PP había presentado un veto (que fue rechazado) a la nueva Ley de Derechos y Deberes: con ella "se inicia el camino que conduce a la desmilitarización, primero, y a la desaparición, después, de la Guardia Civil", se quejó el portavoz popular, Ignacio Cosidó.

La ley abre la puerta a las asociaciones dentro de la Guardia Civil, y pretende aproximar el estatuto de los agentes al del resto de funcionarios.

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Sobre la firma

Pablo Ximénez de Sandoval
Es editorialista de la sección de Opinión. Trabaja en EL PAÍS desde el año 2000 y ha desarrollado su carrera en Nacional e Internacional. En 2014, inauguró la corresponsalía en Los Ángeles, California, que ocupó hasta diciembre de 2020. Es de Madrid y es licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Complutense.

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