_
_
_
_

El 'homicida del metro' se creía "el hijo de Dios", según una forense

Jorge Ramos Vázquez, conocido como el homicida del metro, desarrolló, dos años antes de empujar a Miriam Alonso a las vías, "una trama delirante", en la que creía ser "el hijo de Dios" y tener "la misión de matar a una persona para salvar al mundo", según se reveló ayer durante la segunda sesión del juicio que se sigue contra él en la Audiencia Provincial de Madrid.

Una de las forenses que examinó al procesado, de 26 años, manifestó que la esquizofrenia paranoide que padece se remonta a dos años antes de arrojar a la joven a las vías del metro. La especialista explicó que Jorge elaboró "una trama delirante de tipo místico". "Pensaba que era el hijo de Dios y que tenía que salvar el mundo matando a una persona", apostilló.

Más información
La fiscal retira la petición de cárcel y pide internamiento en un psiquiátrico para el 'homicida del metro'
Condenado a 11 años de internamiento el joven que empujó una chica a las vías del metro

Unos días antes, según la forense, el procesado leyó una frase en Internet que decía: "Días como hoy merece la pena arriesgar". Estas palabras desencadenaron que la tarde del 4 de octubre de 2005 Ramos decidiera, al azar, arrojar a una chica a las vías del metro, pese a no intercambiar conversación con ella. La experta recalcó que estos hechos guardan "relación directa con la enfermedad que sufre", por lo que actualmente está internado en el hospital psiquiátrico penitenciario de Fontcalent (Alicante).

"El delirio le llevó a realizar esa conducta. El comportamiento está condicionado por las ideas patológicas que no se adaptan a la realidad", apuntó la forense, que agregó que en el momento de cometer el delito tenía anuladas "las capacidades cognitivas". La fiscal, que pide siete años de prisión o 14 años en un centro psiquiátrico, solicita que se le aplique una atenuante de la responsabilidad criminal por una anomalía psíquica, debida a la enfermedad que padece.

En la sesión de ayer comparecieron los policías que levantaron el atestado y los que detuvieron a Ramos Vázquez en la garita del hospital militar Gómez Ulla. Un agente explicó que Ramos se encontraba "nervioso" y "asustado" unos 10 minutos después de cometer los hechos. "Decía que escuchaba voces que le decían que le iban a tirar al metro. Comentaba que estaba gordito y que sus compañeros se metían con él", relató el testigo, que certificó que "estaba totalmente ido", porque "no mantenía una conversación normal".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

En la vista oral también compareció el representante legal de Metro, quien indicó que la empresa anticipó 400.000 euros a Miriam con la condición de devolver el dinero en el caso de condenar al procesado a indemnizarla por lo sucedido. En concreto, la fiscal reclama que el encausado abone a Miriam 10.770 euros por el tiempo que tardó en curar de sus heridas y 446.289,77 euros por las secuelas.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_