Rajoy: "Este Gobierno acabará por ofrecer a todos un chalé en el Caribe"

Un "fiasco", porque dejan a un lado los "problemas reales" de los ciudadanos. Éste es el primer análisis del presidente del PP, Mariano Rajoy, sobre los Presupuestos Generales del Estado para 2008, los últimos de la actual legislatura. Rajoy censuró el reparto de las inversiones estatales y las últimas promesas del presidente, José Luis Rodríguez Zapatero. "El Gobierno acabará ofreciéndonos un chalé en el Caribe", afirmó ayer Rajoy.

Los Presupuestos Generales del Estado para 2008 y la negociación del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero con Cataluña y Andalucía para decidir las inversiones en estas comunidades conforme a los criterios que marcan sus nuevos estatutos de autonomía fueron ayer claves en la intervención de Mariano Rajoy en un acto en Granada. Rajoy acudió a esta ciudad para presentar al presidente del PP en Andalucía, Javier Arenas, como candidato a la Junta, en lo que será su tercera tentativa.

El Estatuto de Cataluña establece que la inversión del Estado en esta comunidad será equivalente a su aportación al Producto Interior Bruto (PIB) de España, el 18,8%. Mientras, el andaluz fija como criterio de reparto de las inversiones estatales el peso de la población (en el caso de Andalucía, el 17,8%). Este difícil encaje de las inversiones dio pie a Rajoy a censurar el reparto del dinero público. "El dinero de todos no se puede repartir por cuotas sino según las necesidades", afirmó Rajoy.

El PP rechazó en el Congreso el Estatuto de Cataluña, y recurrió ante el Tribunal Constitucional, entre tras partes del texto, la disposición adicional que fija el criterio de inversión en infraestructuras de acuerdo con el porcentaje del PIB español que aporta Cataluña. Sin embargo, sí apoyó el Estatuto de Andalucía, que regula que esta comunidad autónoma recibirá durante siete años inversiones del Estado según su población.

Arenas, que durante la tramitación del Estatuto andaluz exigió que se incluyese una garantía para que Andalucía recibiese un mínimo de 4.500 millones de euros en inversiones del Estado durante siete años, proclamó: "No consiento que las inversiones se repartan según la riqueza. No aceptamos agravios y nos vamos a rebelar".

Rajoy hizo un reproche sin matices a los Presupuestos del Estado para 2008, presentados el pasado viernes por el ministro de Economía, Pedro Solbes. "Fiasco" y "engaño" fueron los términos que utilizó el líder del PP para definirlos. Según Rajoy, las cuentas públicas olvidan los problemas reales de los ciudadanos, como son los salarios y las hipotecas.

Reforma del IRPF

Asimismo, restó importancia a la rebaja del IRPF que anunció el Gobierno, y subrayó que si gana las próximas elecciones generales, él realizará "una reforma sustancial" de este impuesto, además de rebajar el de sociedades. El líder del PP también aludió a los diferentes planes que el Gobierno ha presentado en los últimos meses, como el cheque-bebé (la ayuda de 2.500 euros a los recién nacidos) o el de vivienda, que contempla ayudas a los inquilinos.

Estas iniciativas, según Rajoy, son "palos de ciego" que han convertido a Zapatero en una "máquina de anunciar medidas a tontas y a locas". "Eso no es serio ni responsable en un dirigente de una potencia económica como es España", afirmó antes de acusar al Gobierno de haberse "comido la despensa llena" que dejó el PP cuando perdió las elecciones en 2004 tras ocho años en el Gobierno.

Finalmente, tirando de ironía, sentenció: "El Gobierno acabará ofreciéndonos un chalé en el Caribe. Y si no, al tiempo".