Camps empieza como acabó

¿Si las cosas funcionan qué necesidad hay de cambiarlas? La respuesta es tan obvia que desde hace meses ya nadie se la plantea en el entorno del presidente de la Generalitat, especialmente después de los históricos resultados obtenidos por el PP en las últimas elecciones municipales y autonómicas.

Ayer, Francisco Camps empezó el nuevo curso político como lo acabó: controlando la imagen, evitando las preguntas que siempre pueden distorsionar el mensaje institucional y enlazando su figura a la de Mariano Rajoy -que representa el proyecto nacional del jefe del Consell-. Una figura que hoy se volverá a vincular también -por trigésima vez- a la del presidente murciano, Ramón Luis Valcárcel, en lo que representa el ariete mediterráneo de los populares contra el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero.

Los líderes del PP tienen pendiente el encaje de Zaplana en las listas electorales

Camps incluyó en su agenda institucional de ayer dos actos. Primero una comparecencia, con la dirección de Ford Europa, en el Palau de la Generalitat tras el acuerdo firmado horas antes entre la dirección y los sindicatos de la compañía automovilística en la factoría de Almussafes. En el Palau, como ya es habitual, no hubo opción a preguntas de los periodistas. Allí, Camps se limitó a calificar el acuerdo de Ford con UGT de "noticia importantísima para la Comunitat Valenciana en todos los aspectos, ya que su incidencia no sólo es económica sino también social, de ánimo, de prosperidad, de creación de empleo y de opciones de futuro". Luego posó para los fotógrafos y se retiró a su despacho acompañado por los representantes de Ford.

Por la tarde, Camps se desplazó a Alicante para asistir con el presidente nacional del PP, Mariano Rajoy, a un partido amistoso de la selección española de baloncesto. Hoy, como presidente de la Generalitat, mostrará al líder de la oposición en el Congreso de los Diputados los estudios cinematográficos de la Ciudad de la Luz y los preparativos en el puerto de Alicante para la regata Volvo Ocean Race.

Los encuentros retoman la cita que mantuvieron Rajoy y Camps el pasado mes de julio, en la que oficiaron una fiesta mitin en Xàtiva para celebrar los resultados electorales y lanzar ya la precampaña del líder nacional del PP en la Comunidad Valenciana. En esta ocasión, ambos líderes se reúnen en Alicante con la polémica planteada por la pretensión de Alberto Ruiz Gallardón, alcalde de Madrid, de figurar de número dos en la lista por Madrid en las próximas elecciones generales. Una polémica que enmarca también la difícil decisión de encontrarle acomodo en las listas al portavoz del PP en el Congreso y expresidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana.

Zaplana se presentó de cabeza de lista por Valencia en las elecciones generales de 2004, pero tras haber perdido la batalla orgánica frente a Camps es improbable que repita en esta circunscripción que le es hostil. Liderar la lista por Alicante podría ser una opción, pero esa alternativa cuenta con la oposición del actual cabeza de lista, Federico Trillo, que hoy y mañana también tiene previsto acompañar a Camps en los actos de partido. Primero en la reunión con Valcárcel -la última fue en julio en Alicante- en la localidad de San Pedro del Pinatar y al día siguiente en la cena de partido en Elda. Así que todo arranca como acabó.