_
_
_
_

La contratación de mujeres hace caer desde el 90% al 13% las fugas de temporeros marroquíes en Huelva

Casi todas las temporeras marroquíes seleccionadas por empresarios agrícolas de Huelva para trabajar durante unos meses han retornado a Marruecos. Sólo el 12,8% de las 4.632 mujeres incumplieron la principal condición de su contrato: regresar a su país de origen una vez finalizada la campaña.

La cifra dista mucho del 90% o del 50% de fugas que se registraron en 2005 y 2006, cuando los contratados fueron varones marroquíes, según el alcalde de Cartaya, Juan Antonio Millán, el artífice del programa Aeneas, una iniciativa de la Unión Europea liderada por este municipio para facilitar la gestión de los contratos en origen de trabajadores en Marruecos a las organizaciones agrarias.

Por la experiencia de años pasados, en los que la tasa de abandono de los temporeros marroquíes resultó tan elevada, los empresarios tenían ciertas reticencias a recurrir de nuevo a Marruecos para buscar temporeros este año. De ahí que se plantease una nueva estrategia de contratación, en la que se han seleccionado principalmente mujeres con algún tipo de carga familiar -hijos, en su mayoría- en Marruecos, como garantía de que retornarán a su país. "El porcentaje de un 12,8% de fugas de este año puede reducirse incluso más, porque nuestros técnicos de Aeneas en Rabat están comprobando que algunas de las mujeres que se daban por fugadas están retornando por su cuenta a Marruecos en los plazos legales", afirma Millán.

La garantía de retorno es una exigencia para la contratación en origen, y un requisito para que la jornalera repita en campañas futuras en España. Los buenos resultados de 2007 han llevado al alcalde de Cartaya a adelantar su intención de aumentar el cupo de trabajadoras hasta 10.000 el año que viene.

Las cifras de abandonos que maneja Asaja entre sus empresarios superan las del informe de Aeneas. "Calculamos que alrededor de un 25% de nuestras trabajadoras no han vuelto acompañadas y que o bien se han quedado en España, con lo que incumplen el contrato, o han vuelto por su cuenta a Marruecos", dice Ricardo Escobar, técnico de esta entidad agraria.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_