"¿Por qué algunos me ven como un enemigo?"

Una campaña contra el alcohol, heredada de su antecesora, Elena Salgado, preside la entrada del Ministerio de Sanidad y Consumo. Pero una imagen de un laboratorio definiría mejor al nuevo ministro, Bernat Soria. Este médico de 56 años nacido en Carlet (Valencia) siempre pensó en investigar. "Cuando estudiaba había una figura que eran los alumnos internos. Hacíamos unas oposiciones muy duras que valían por 30 matrículas de honor", cuenta con el orgullo con que menciona la presidencia de sociedades científicas o que fue el decano de Medicina más joven de España. Sólo ha ejercido dos años como "médico de pueblo". Después, se fue a Alemania. En España se hizo famoso cuando el PP, desde los gobiernos central y valenciano, le impidió investigar con células madre embrionarias aplicadas a la diabetes. Ante las presiones, apoyadas por la Iglesia católica, halló cobijo en Andalucía. Para los diabéticos es su primer mensaje: su investigación no va a detenerse.

"España es la octava potencia económica del mundo, pero no lo es en investigación. Hay que movilizar también a la inversión privada"

"El modelo de financiación está fallando. Nos gustaría saber qué parte del dinero transferido a las comunidades se ha gastado realmente en sanidad"

Pregunta. El 9 de julio tomó posesión, y ya concede entrevistas. ¿Queda muy poco por hacer o lo tiene todo claro?

Respuesta. Lo que ocurre es que estoy muy acostumbrado a trabajar mucho. He hecho una inmersión en los temas del ministerio y creo que ya tengo una perspectiva. Por otra parte, nunca he dejado de ser médico y nunca he dejado de estar informado. Ocho meses puede parecer un periodo corto, pero estoy seguro de que se pueden tomar iniciativas. Hay un mensaje distinto, que ha lanzado el propio presidente, de apoyo a la investigación. Espero en este periodo poder hacer cuatro o cinco actuaciones en este sentido.

P. ¿Por ejemplo?

R. La potenciación de la investigación ligada a las necesidades de los pacientes. Eso va a exigir un esfuerzo por parte del Gobierno, no solamente en financiación pública, sino también en movilizar a la inversión privada.

P. ¿Como con la Fundación pro Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares?

R. Es una buena idea. Ha dinamizado a sectores económicos que tienen una visión que el Gobierno comparte y que puedo resumir: España es la octava potencia económica del mundo, pero no lo es en investigación.

P. ¿Qué sintió cuando la Comunidad Valenciana anunció que investigaba con embriones, después de prohibírselo a usted?

R. Es difícil de expresar. Por una parte, cualquier investigador va a tener siempre mi simpatía. Pero, por otra, el que se facilitara a un grupo el trabajo y a mí se me impidiera me produce un cierto amargor. Y, sobre todo, cuando lo hacen los tuyos, los de una comunidad con la que te identificas. Aún no entiendo por qué algunos sectores de la sociedad ven en mí un enemigo.

P. ¿Cómo fue su primer Consejo Interterritorial?

R. Fue muy bien. El Consejo Interterritorial es político, pero no es para el debate partidista. Hay que intentar que el Consejo Interterritorial sea el organismo que coordina, cohesiona y ayuda a resolver los problemas de salud de la sociedad.

P. ¿No necesita capacidad de decisión?

R. Hay que saber dónde están las competencias. Los organismos de coordinación tienen que hacer un esfuerzo por coordinar, pero tenemos que ser respetuosos con la Constitución. El Gobierno tiene unas competencias y hay competencias que están transferidas.

P. ¿Ya le han pedido tratar la financiación sanitaria?

R. Sí. Pero la financiación sanitaria como tal no existe. Lo que existe es un modelo de financiación autonómica, que se aprobó con el Gobierno del PP, que hay que revisar, porque estoy convencido de que está haciendo agua. Y nos gustaría saber cuál es el gasto sanitario real. Cuando el Gobierno transfiere en el periodo 2005-2006 6.800 millones de euros adicionales, que es mucho dinero, nos gustaría saber qué parte se ha gastado en sanidad. Hay un grupo de trabajo que está recabando datos.

P. ¿Va a dar voz a los pacientes, como tienen las ONG en Consumo?

R. No me atrevo a anunciar ninguna iniciativa, pero sí la actitud del ministro de Sanidad y del Gobierno, que es generar un vínculo continuo con ellos. Este Gobierno ya ha contado con ellos en los Planes de Calidad de algunas patologías. En ese camino tenemos que continuar trabajando.

P. ¿Va a retomar la ley antialcohol?

R. Yo creo que esa ley, que está aparcada, no fue en su momento leída cuidadosamente. Vamos a seguir trabajando para que los menores no entren en conductas adictivas. Yo apelo a la responsabilidad de los gestores de las comunidades y que piensen en el daño cerebral que tiene el alcohol cuando lo consume un menor.

P. ¿Endurecerá la ley antitabaco?

R. La ley del tabaco ha sido aplaudida por los médicos como nunca habíamos aplaudido nada. Entrar en el detalle de hasta dónde vamos a llegar me parece excesivo.

P. ¿Cómo va el consumo de drogas?

R. No me gusta hacer predicciones.

P. No pido predicciones, sino un adelanto de datos.

R. Sé las actuaciones que se han hecho y permiten suponer que tendremos resultados positivos en la próxima encuesta sobre drogas.

P. ¿Cómo paliar el déficit de profesionales sanitarios?

R. Faltan especialistas, pero no en todas las ramas. Es un problema que hay que ver con perspectiva. Formar un médico cuesta 10 años: seis de carrera y cuatro de especialidad. Si estamos en 2007, yo pregunto: ¿quién estaba en el Gobierno en 1997? Si la sociedad tiene un problema, es porque en aquel momento no se adoptaron medidas. Y para que no lo tengamos en 2015, que es cuando se espera la crisis, hay que tomar medidas ahora. Por ejemplo en Andalucía el aumento de plazas en las facultades este año ha sido del 15%; otras comunidades también siguen esa tónica. Eso es algo que tenemos que hacer de acuerdo con el Ministerio de Educación. Hay un grupo que ha trabajado muy bien en el Ministerio de Sanidad, con las comunidades autónomas, para saber lo que necesitamos hoy y lo que necesitaremos. Eso permite que el programa de formación se adapte a las necesidades. Junto con eso estamos recibiendo especialistas de otros países. Y ahí estamos diseñando medidas para que la homologación vaya más rápida.

P. ¿Y eso no disminuye la calidad?

R. No, en absoluto. Hay que tener índices claros que nos permitan tomar decisiones. Si me trae un pediatra formado en Harvard, va a ser muy rápido.

P. ¿Y si no es de Harvard?

R. Vamos a vigilar. Estamos en un contexto global, y eso hay que tenerlo en cuenta. Pero estamos resolviendo el tema. Si no, sería muy difícil hacer la afirmación que voy a hacer: España, en calidad del sistema nacional de salud, ocupa el sexto lugar del mundo.

P. Siempre nos olvidamos de Consumo.

R. Mi primera reunión la tuve con las asociaciones de consumidores. Es un mensaje. En consumo tenemos competencias y sistemas de vigilancia que funcionan bien. El sistema ha detectado los dentífricos con dietilenglicol. No ha habido ni un solo caso de intoxicación, se han analizado más de 450 partidas y en un tiempo récord se han retirado del mercado las que se sospechaba que podían llevar este aditivo ilegal. El primer mensaje es de tranquilidad. Pero también hay un mensaje de responsabilidad, que tiene que ver con la compra de productos convenientemente etiquetados. A mí lo que me preocupa es que ese producto lo compraban gerentes de hospitales.

P. ¿Abrirá el debate sobre la eutanasia?

R. He reflexionado sobre la regulación de la eutanasia, y dudo que sea en esta legislatura. Cuando llegue el momento, empezaremos a discutir caso a caso, y ahí necesitaremos no solamente la visión del médico, sino la del jurista, la de la gente de la calle e incluso la de gente que viene del ámbito de las creencias. Y eso nos va a ayudar a tener unas leyes que respondan de verdad a cómo es la sociedad. Siempre he tenido la impresión de que la sociedad está mucho más avanzada que las normas que dictamos los Gobiernos.