Los Gobiernos de España y Francia se conjuran para erradicar "el flagelo que supone ETA"

El primer ministro francés, François Fillon, y el presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, compartieron ayer en el palacio de la Moncloa las mieles de los éxitos policiales en suelo francés. Y se conjuraron, una vez más, para acabar con el terrorismo etarra.

Las policías a ambos lados de la frontera, mucho más discretas, prefieren seguir su trabajo, concienzudo y muchas veces sordo, en la sombra, ante la sospecha de que el zarpazo de la banda, pese a su acreditada debilidad, está aún por llegar.

Zapatero afirmó que a la cooperación francesa en la lucha antiterrorista le corresponde "una matrícula de honor"

El primer ministro francés asegura que hay una "disminución" de "la calidad de la organización de los terroristas"

La policía encuentra en el piso de los miembros del aparato logístico abundante documentación y detonadores

Fillon consideró que las detenciones de etarras en suelo francés -17 supuestos activistas desde el final oficial del alto el fuego permanente de ETA, el pasado 5 de junio- hacen pensar en que la infraestructura de la banda terrorista "se ha reducido mucho" en ese país. El primer ministro incluso se atrevió a sugerir que la "calidad de la organización" no atraviesa ya sus mejores momentos, dando a entender que la ETA actual no es ya lo que fue en otras épocas.

Colaboración fundamental

Fillon hizo este balance en rueda de prensa en el palacio de la Moncloa tras reunirse con José Luis Rodríguez Zapatero, quien aseguró que si las relaciones hispano-francesas merecen un "sobresaliente", a la cooperación francesa en la lucha antiterrorista le corresponde una "matrícula de honor". "Quiero que los ciudadanos sean conscientes de esta colaboración, que lo son, y que los franceses sepan que España es un país que sabe ser agradecido con los amigos de verdad", remachó el presidente español.

Fillon reiteró la "determinación total" de su país de estar al lado del Ejecutivo español para "erradicar este flagelo" y consideró que las últimas detenciones de cuatro etarras demuestran que su Gobierno se "lo toma muy en serio".

Mientras tanto, los agentes de la Policía Judicial francesa mantenían a buen ritmo las investigaciones sobre el ingente material (documentación en papel y soporte informático) hallado el pasado jueves en el piso ocupado por el supuesto jefe del aparato Logístico de ETA en Rodez (Aveyron), Juan Cruz Maiza Artola. Un piso que había alquilado a un gendarme, lo que demostraría esa escasa calidad que ayer mencionó el primer ministro francés tras su encuentro con Rodríguez Zapatero.

Las fuerzas de seguridad españolas indicaron que la Policía Judicial ha hallado en el interior del inmueble de Rodez ordenadores, diverso material informático, detonadores y otros instrumentos electrónicos para la fabricación de material explosivo que ninguna fuente quiso precisar. En concreto, los agentes deben analizar el contenido de las tres unidades CPU (discos duros informáticos) y la información que pueda haber en los dispositivos USB. El trabajo parece, a primera vista, ingente.

La cooperación hispano-francesa en materia antiterrorista tendrá un nuevo impulso el próximo martes, cuando el ministro español del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, se entreviste en París con su homóloga francesa, Michèle Alliot-Marie, [Por otra parte, el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz dejó ayer en libertad, con comparecencias semanales, a Joseba Mikel Otxoa Alonso, un joven de 23 años detenido el pasado jueves en Vitoria por la Ertzaintza (policía vasca) por su presunta relación con, al menos, dos sabotajes realizados este año contra sendas entidades bancarias en la capital alavesa].