Caballos Zeta Horse: "Gastamos la mitad en teléfono"

A la entrada de la finca de Zeta Horse Farm, en Miraflores de la Sierra, te saludan Pablo, el enorme mastín; Chucky, el chucho travieso; Matilde, la burra enana... La bucólica empresa está a media hora larga de la capital de España.

En ese tranquilo lugar la danesa Cristina Perregaard y su marido viven y cuidan de unos treinta caballos. Es un negocio de cría y doma de animales que puede alcanzar los 300.000 euros: atletas de cuatro patas con tres años de entrenamiento a sus espaldas, fisioterapia dos veces al mes y un herrador que viene de Dinamarca para calzarles adecuadamente.

Como la finca está dentro de un parque protegido (Cuenca Alta del Manzanares) no hay línea de teléfono terrestre. La familia danesa tuvo que colocar una antena satélite que les costó 3.000 euros y que, además, no puede proveerles de banda ancha. Aislados en medio del monte, las comunicaciones son fundamentales para el negocio de la pareja, que de hecho se conoció por Internet, cuando él se puso en contacto por correo electrónico con la madre de ella, también criadora de caballos.

"Entre el 75% y el 80% de nuestros clientes llegan por Internet", dice Perregaard, cuya empresa está especializada en caballos españoles y alemanes, tiene una página en tres idiomas (español, inglés y danés). Tras un primer contacto online, llegan las conversaciones telefónicas y los gastos. "Antes de usar la telefonía IP nos podíamos gastar entre móviles y fijos más de mil euros al mes", cuenta Cristina, "ahora hemos bajado la factura telefónica a la mitad".

Cristina usa conexiones de PC a PC, sobre todo en lo personal, para hablar a diario con su madre, que vive en Dinamarca, y enseñarle por vídeo cómo va creciendo Oliver, su hijo de 16 meses de edad.

Con los clientes no usa cámara. Suele llamar con el servicio Skype Out desde su ordenador a un fijo extranjero. "La primera vez que vi las tarifas no me lo podía creía", dice, "hablaba y hablaba y seguía habiendo crédito". Para ella es básico no preocuparse por el reloj, ya que puede llegar a cerrar por teléfono ventas de entre 10.000 y 20.000 euros.

"Te sientes un poco engañada por todos los años que llevas pagando carísimas las conferencias", dice la amazona y sentencia: "En el futuro la gente no usará el telefono". ¿Podría vivir aquí sin tecnología? "Podría, pero todo sería mucho más complicado".

ZETA HORSES: www.spanishprehorse.com