Royal acusa al PS de imponerle propuestas electorales "no creíbles"

Tras oficializar la ruptura sentimental con François Hollande como pareja, Ségolène Royal ha pasado a proclamar su ruptura política con Hollande como secretario general del Partido Socialista francés. En sus primeras reflexiones sobre fallos de la campaña, la ex candidata presidencial criticó haber tenido que defender puntos del programa del PS que, asegura, restaron credibilidad al suyo, como aumentar el salario mínimo hasta los 1.500 euros y la generalización de la semana laboral de 35 horas, ideas que "no eran creíbles".

Hollande no se mordió la lengua. En una campaña, vino a decir, las sinergias viajan en ambos sentidos. "Era necesaria una coherencia entre la candidata y quienes la apoyan", apuntó. La noche del miércoles, en una entrevista radiofónica, Royal realizó una primera autocrítica de su campaña perdida frente a Nicolas Sarkozy y atribuyó parte de la responsabilidad al partido. Se vio obligada a incluir en su programa el salario mínimo de 1.500 euros y la generalización de las 35 horas por "coherencia" con el proyecto del PS. "Yo misma tenía dudas", señaló, pero fue "una idea faro de

[el ex primer ministro] Laurent Fabius" y esto supuso un "déficit de claridad de mi proyecto político".

Royal ya no cree en la lucha de clases. "Creo que hay que salir de una vez del tradicional enfrentamiento entre asalariados por un lado y empresarios por otro, completamente sobrepasada. Esto es lo que creo que es fundamental para la renovación del PS y para disponer de un programa social y económico moderno", manifestó.Royal se refirió a la entrada de personalidades socialistas y de izquierdas en el Gobierno de François Fillon en unos términos muy distintos de los que ha utilizado el partido. "Debería hacernos reflexionar", comentó, "creo que la izquierda lleva retraso, que los socialistas se han quedado atrás en cuestiones como la diversidad".

La líder socialista exprimió sus deseos de que el cambio llegue lo antes posible al PS. "Creo que es necesario que pase algo rápidamente, que algo se mueva, que la gente sienta que el PS vuelve a ser un lugar de discusión, de refundación ideológica, de trabajo, que atraiga a los mejores, que haga converger a las fuerzas vivas antes de que se vayan". "Hay que dar de nuevo la palabra a los militantes. Yo quiero ser la garante de la democracia interna en el partido", añadió.

Sobre el Consejo Nacional del PS de mañana, en el que Hollande propondrá mantener el calendario previsto y dejar el Congreso para el otoño de 2008, Royal señaló: "No quiero crear un conflicto sobre el calendario, pero pienso que hubiera sido mejor ir más deprisa para trazar una línea política". Hollande ya ha señalado que propondrá que el PS designe su candidato a la presidencia en 2010. Hollande le respondía ayer. "Tiene razón sobre un punto", afirmó, "el salario mínimo a 1.500 euros no es suficiente".