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Rajoy pregunta sobre el precio de la luz y el Gobierno exhibe su gestión

Zapatero recuerda que Rajoy congeló el sueldo a los funcionarios

Carlos E. Cué

Tarde de números y contenido en el Congreso. La decisión de Mariano Rajoy de aparcar la lucha antiterrorista en las sesiones de control le llevó ayer a atacar al Gobierno con la subida de los recibos de la luz. Tanto José Luis Rodríguez Zapatero como María Teresa Fernández de la Vega aprovecharon el envite del PP para exhibir su gestión económica y sus reformas sociales, algo que el asunto antiterrorista les impedía hasta ahora.

Mariano Rajoy decidió ayer seguir la máxima que había lanzado a sus diputados la semana pasada en una reunión interna: "Tenemos que hablar de las cosas que le interesan a la gente, aunque no estén en las portadas de los periódicos". Y así lo hizo. Aunque todas las portadas estaban centradas en el asunto navarro, él y los suyos lo obviaron en el Congreso. Y se centraron en el recibo de la luz. El Gobierno, ante este cambio de tercio, salió en tromba a reivindicar su gestión económica y social.

"Ayer Eurostat, que depende del señor Almunia, decía que España era el país de los Quince donde más se reducía el poder adquisitivo de las personas", abrió el fuego Rajoy, empeñado en los últimos meses, como todo su partido, en lanzar la idea de que la economía española va bien pero esa bonanza no llega al ciudadano de a pie.

Zapatero, visiblemente más cómodo que en las habituales sesiones broncas centradas en la lucha antiterrorista, contestó con calma: "Tengo que hacerle alguna matización a sus afirmaciones iniciales. En 2006 ha habido un incremento de las rentas salariales de nuestro país por encima del IPC. El informe ha salido recientemente y me gustaría que hubiera hecho referencia a ello".

Rajoy insistía con la misma idea y, sobre todo, atacaba con la subida del recibo de la luz, de la que acusó directamente a las maniobras de Zapatero en la OPA a Endesa. "Sus enjuagues, sus decisiones y el monumental lío que ha creado en el sector eléctrico ahora lo paga el conjunto de los contribuyentes españoles. Lo menos que puede hacer aquí es decir la verdad, porque ahí están los dos decretos aprobados por el Gobierno de España que, que se sepa, usted preside".

Iniciativas sociales

Zapatero aprovechó que el Gobierno tiene siempre el último turno para presumir de algunas de sus iniciativas sociales, precisamente las que, se lamentan los socialistas, han quedado más tapadas para la opinión pública por el debate sobre la lucha antiterrorista: "La subida de la tarifa doméstica irá en línea con el índice de precios al consumo". Ángel Acebes bromeó después: "Ahora los precios no suben ni bajan, están en línea". "¿Sabe lo que ha subido este Gobierno por encima del IPC? El salario mínimo que ustedes congelaron durante ocho años", espetó Zapatero a Rajoy. Ahí comenzó a calentarse el ambiente. "Y las pensiones mínimas que afectan a tres millones de pensionistas, el doble de la evolución del índice de precios al consumo", siguió Zapatero entre las protestas de los diputados del PP. "Y las retribuciones de los empleados públicos, que usted siendo ministro congeló, y las de algunos colectivos de empleados públicos como Policía, Guardia Civil o nuestras Fuerzas Armadas, que han subido el 20%, la mayor subida de la historia".

Ahí se vio clara la estrategia del Gobierno, que quedó aún más en evidencia cuando Acebes y Eduardo Zaplana preguntaron a la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega si en España están garantizados los derechos y las libertades. El PP recuperó la detención ilegal de dos militantes de este partido -un asunto que saca en casi todas las sesiones-, los informes contra el presidente del BBVA y el supuesto espionaje al presidente de Endesa.

De la Vega decidió aprovechar la ocasión para detallar, como si estuviera ya en campaña electoral, los logros más importantes de su Gobierno en cuanto a la ampliación de derechos: "Derecho a la igualdad, derecho a la autonomía personal; más derecho para los ciudadanos que viven en el exterior; más derechos para el matrimonio; derecho a la libertad y a la seguridad, con más de 11.000 policías y guardias civiles; derechos a la seguridad para todos, no sólo para los que se los pueden pagar; derecho a la información, por primera vez los medios de comunicación públicos, señoría, son independientes; derecho al trabajo, con la tasa más baja de paro de la historia".

María Teresa Fernández de la Vega, durante la sesión de control de ayer.
María Teresa Fernández de la Vega, durante la sesión de control de ayer.EFE

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