Socialistas e ICV asumen el gobierno de Barcelona con ERC en la oposición

Las cuatro capitales de Cataluña están dirigidas desde ayer por alcaldes socialistas, con la incorporación de Tarragona tras la victoria de Josep Felix Ballesteros (PSC) que con el apoyo de ERC desbancó a CiU de una alcaldía que ha gobernado en los últimos 18 años.Barcelona, que lleva 28 años con gobiernos de izquierdas, estrenó ayer un gobierno del mismo signo pero en minoría

tras la decisión de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) de pasar a la oposición con sus cuatro concejales. El socialista Jordi Hereu tomó ayer posesión del cargo consciente de ello. De ahí las constantes referencias a lo largo del acto a una política basada en "el pacto y los acuerdos".

Los 14 ediles que obtuvo el PSC más los 4 de sus socios de ICV-EUiA son insuficientes frente a los 23 concejales que suman CiU (12), PP (7) y ERC (4). Ante esa situación de debilidad, tanto Hereu como su socia, Imma Mayol, se refirieron en más de una ocasión a la voluntad de llegar a acuerdos y "buscar la complicidad, especialmente de Jordi Portabella (ERC)" con quien han "gobernado los últimos ocho años". El líder republicano aseguró que ejercerá una oposición "constructiva y coherente" con su posición.

La coalición se comprometió a dar un giro social al mandato que empieza. La prioridad, dijo Hereu, será atender a las necesidades primordiales de la población, como la vivienda y las políticas sociales y buscar la forma de mejorar la cohesión social de una ciudad que se ha convertido en una de las de referencia de la inmigración. "El resultado de las elecciones y la alta abstención nos dicen que tenemos que trabajar más para devolver a los ciudadanos la confianza en los políticos", resumió Hereu.

La constitución de los 946 ayuntamientos catalanes no deparó grandes sobresaltos porque todos los partidos se apresuraron durante la semana a sellar sus pactos para conseguir alcaldías. Los acuerdos consolidan al PSC como fuerza hegemónica, pues gobernará más de 75% de la población, es decir, las cuatro capitales de provincia, el conjunto del área metropolitana y 21 comarcas. Convergència i Unió seguirá siendo la primera fuerza en número de alcaldes (420) aunque ve limitado su poder a las poblaciones medianas y pequeñas. Sus principales plazas son Martorell y Sant Cugat, en el área metropolitana, y Tortosa, en el Sur. Con todo, la extensión de los tripartitos no ha sido tan amplia como temía CiU.

Algunos pactos resultaron insólitos como el de Castelló d'Empúries o Blanes, donde los votos del PP dieron la alcaldía a ERC o Cerdanyola, donde el PP votó a favor de ICV.