El 90% de los ginecólogos de Azores objetan contra el aborto

Al menos 18 obstetras y 17 enfermeros de los dos hospitales más grandes de las Islas Azores han alegado por escrito objeción de conciencia para realizar la interrupción voluntaria del embarazo a petición de la mujer en las primeras diez semanas, de acuerdo con la nueva legislación portuguesa. De momento, la objeción afecta a cerca del 90% de los ginecólogos de las islas, pues la única excepción son tres especialistas del hospital de la isla de Horta, que aun no han aclarado cuál es su intención. La situación puede obligar a las mujeres residentes en Azores que deseen realizar una IVE (interrupción voluntaria del embarazo) a cambiar de isla o a salir del archipiélago, a unas dos horas y media de avión del continente.

El presidente del Gobierno regional de las Azores, Carlos César, ha garantizado que el Ejecutivo asumirá los gastos de los traslados de las mujeres que quieran abortar en un servicio hospitalario donde haya clínicos que no objeten. Según los hospitales azorianos, la mayoría de los médicos mantienen su disponibilidad profesional para atender los supuestos previstos en la legislación anterior -violación, malformación o peligro para la vida de la madre-. A juicio de Helena Pinto, diputada del Bloco de Esquerda, la nueva ley protege la objeción de los médicos, pero "un hospital no puede ser objetor".