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Reportaje:

Marido, esposa y la parejita

El alcalde de Ayamonte inaugura un monumento a la familia tradicional

En Ayamonte (Huelva), se levanta un monumento a la familia. "A la familia tradicional", puntualiza el alcalde en funciones del municipio, Rafael González (PSOE), que está a punto de abandonar el cargo en favor de otro edil socialista. Un vistazo a la obra, cuya altura, según el Ayuntamiento es de 7,2 metros de alto, da fe de las palabras del todavía regidor. Las figuras desnudas de un hombre, una mujer y sus dos vástagos, niño y niña, rodean a un árbol -metáfora del genealógico-, de tres metros y medio de copa. Mirando al conjunto, algún vecino le echa humor y exclama: "¡Sólo les falta un gatito!".

Pero hay otros a los que esta escultura, inaugurada el domingo, no les hace tanta gracia. "Existen otros muchos modelos de familia, como el formado por dos hombres, o dos mujeres, con o sin hijos, madres solas con hijos, o padres solos con hijos...", declara Antonio Ferre, presidente de la federación andaluza de Colegas, asociación que lucha por la igualdad de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales.

El alcalde, el mismo cuya devoción facilitó en 2004 que la imagen de Nuestra Señora de las Angustias -patrona y alcaldesa perpetua del pueblo- presidiese el salón de plenos del Ayuntamiento, afirma que no ha querido herir ningún sentimiento. "Lo que hemos querido representar es a la familia tradicional. Sólo eso". Y es que, los matrimonios entre personas del mismo sexo, con o sin hijos, son para Rafael González otra cosa. "Ahora se confunde lo que es la familia tradicional con la convivencia. (...) A dos personas del mismo sexo que viven juntas yo no le llamo familia, le llamo convivencia, y les respeto. Pero la familia nace del hombre y la mujer. Y después, de los hijos; los retoños, si hablásemos de un árbol".

El alcalde prosigue con este símil vegetal para plasmar sus ideas: "Si de un almendro quieres obtener melocotones, tienes que hacer un injerto. Rajarlo y meterle una ramita de melocotón para que, de ahí, salga el fruto. Es algo contra natura. Yo respeto esa convivencia

[el de personas del mismo sexo, no el de almendras y melocotones], que puede ser loable, llevadera y buena, pero la familia es la que es. La que siempre ha sido. Es la que yo defiendo".

A pesar de apoyar vehementemente los conceptos más tradicionales, el alcalde se esfuerza en recordar que él está de acuerdo con leyes ideadas y aprobadas por su partido, como la del matrimonio homosexual.

Oposición de IU

La inauguración de la estatua ha encontrado la oposición pública de IU, que criticó el gasto desmesurado (unos 145.000 euros), la falta de consenso político para llevarla a cabo y la discriminación por haber excluido modelos familiares distintos. "No tiene sentido este tipo de homenaje a la familia tradicional en el momento social y legal en el que nos encontramos en España", afirma Antonio Miravent, portavoz en funciones de la coalición en el Ayuntamiento.

El edil de IU ha criticado durante años la pasión del alcalde por sembrar de estatuas el pueblo. Una de las más famosas hasta la fecha era, sin duda, la colosal imagen de la patrona del municipio, de unos 12 metros de alto, esculpida en mármol blanco, cuyas dimensiones la convertían en la más grande de Andalucía. Eso sí, a un precio de 452.000 euros.

"Lo que me he planteado es hacer de la ciudad una especie de museo al aire libre, con esculturas que recogiesen las tradiciones y creencias de este pueblo. Ya casi hemos hecho una treintena", explica Rafael González.

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