Zapatero ofrece a Rajoy un pacto de emergencia ante el desafío de ETA

Una cita crucial en La Moncloa. El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, propondrá hoy al líder de la oposición una especie de borrón y cuenta nueva, un pacto de emergencia ante la gravedad de la amenaza de ETA, una vez rota formalmente la tregua de 2006. En un encuentro precedido por la división, y ante un Partido Popular que ha hecho de ello un arma arrojadiza contra el Gobierno, Zapatero propondrá a Mariano Rajoy un acuerdo que deje el terrorismo fuera del debate político, para no beneficiar a ETA, y que incorpore a todos los partidos democráticos. Zapatero no quiere condiciones previas ni rectificaciones.

Rajoy, según fuentes del PP, reclamará la ilegalización de Acción Nacionalista Vasca (ANV), aunque evitará presentarlo como una condición previa, y pedirá garantías de que Zapatero será implacable con ETA, tal y como prometió el sábado en su discurso más duro desde la ruptura formal de la tregua. En los últimos días, desde que la banda terrorista anunció el final del alto el fuego, el etarra Iñaki de Juana ha sido reenviado a la cárcel; el portavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi, ha sido encarcelado, y un comando de ETA ha sido detenido en el sur de Francia.

Zapatero quiere transmitir a Rajoy, según fuentes de La Moncloa, que considera clave su incorporación a la unidad contra ETA para evitar que la banda terrorista se beneficie de la división entre los demócratas y marque la agenda política nacional.

El presidente del Gobierno pretende relanzar un pacto antiterrorista sin exclusiones. Le parece muy importante contar no sólo con el apoyo del PP, sino del PNV, un partido cuyo líder, Josu Jon Imaz, mantiene una posición de firmeza contra ETA, inédita en la historia de este partido y muy útil en el objetivo de aislar a los terroristas.

Rajoy analizará esta mañana con sus hombres más próximos el mensaje que trasladará a Zapatero en La Moncloa y que, según fuentes del PP, no podrá ser un no rotundo a la ampliación del Pacto Antiterrorista. El líder del PP pretende modular las críticas al Gobierno y acercarse a los nacionalismos moderados con la vista puesta en las próximas elecciones.