Desarticulada una red que vendía sustancias dopantes tras la muerte de un joven

Un joven culturista de 28 años murió el pasado noviembre en una localidad de Barcelona después de haber consumido, supuestamente, sustancias dopantes. El chico era cliente de una red que se dedicaba a la distribución de estas sustancias, así como a la fabricación de medicamentos falsos. Los Mossos d'Esquadra desmantelaron ayer la banda y detuvieron a doce personas. Entre ellos, a sus dos máximos responsables: Jonathan S. G., de 26 años, e Isidro C. M., de 40. Ambos están acusados de un delito de homicidio imprudente.

La policía autonómica catalana se ha incautado de más de 100.000 dosis de anabolizantes y otros productos, que la red tenía en diversas localidades catalanas. Su valor en el mercado supera los 300.000 euros. Los Mossos sospechan que entre los clientes de la banda había ciclistas semiprofesionales, ya que durante los registros se halló EPO. Sin embargo, la mayoría de consumidores eran culturistas, que adquirían los medicamentos en tiendas de complementos alimenticios para deportistas, en gimnasios e incluso a través de porteros de discoteca. Los jóvenes llegaban a pagar entre 300 y 500 euros por un tratamiento de diez semanas.

La organización actuaba desde hacía un año y tenía intención de expandirse por el resto de España. Se da la circunstancia de que uno de sus dos líderes (Isidro C. M.) actuó como jurado en la última edición del Campeonato de Cataluña de Fisioculturismo.

La fabricación de los medicamentos se realizaba sin las necesarias medidas de esterilización e higiene. En muchos casos, además, el contenido del envase no se correspondía con lo que indicaba la etiqueta. De ahí el riesgo añadido de las sustancias dopantes distribuidas por la banda.