_
_
_
_
Cumbre del G 8

China rechaza un compromiso concreto para reducir emisiones

El presidente chino, Hu Jintao, llegará a la cumbre del G 8, que se celebrará la semana que viene en Alemania, con el plan de su Gobierno para luchar contra el cambio climático bajo el brazo. Espera de este modo responder a las presiones que sufre la cuarta economía del planeta para que haga más para luchar contra esta amenaza. Pero Hu no aceptará en la reunión ningún compromiso concreto para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero -culpables del calentamiento global-, según señalaron en Pekín responsables del plan.

El programa nacional, que será presentado el lunes, promoverá la conservación de energía y el uso de nuevas tecnologías, e incluirá políticas como la reforestación. Sin embargo, se esperan pocas sorpresas. Marcará objetivos a corto plazo -que deberán ser alcanzados para 2010-, algunos de los cuales coincidirán con los que ya comunicó el primer ministro, Wen Jiabao, el pasado marzo, durante la sesión anual de la Asamblea Popular Nacional.

Más información
Europa recibe con recelo el plan de Bush para luchar contra el cambio climático

Wen dijo que China reducirá un 20% el consumo de energía por unidad de producto interior bruto (PIB) y cerrará pequeñas centrales térmicas con una capacidad de generación conjunta de electricidad de 50 millones de kilovatios entre 2006 y 2010. El país asiático obtiene el 70% de su energía en plantas que queman carbón, y producen grandes cantidades de CO2. Las emisiones de gases invernadero chinas alcanzaron el año pasado el 97% de las estadounidenses, cuando en 2001 eran poco más del 40%. Pekín pretende que a finales de esta década las energías renovables, como la hidroeléctrica o la solar, supongan el 10% del total.

En 2009, primer emisor

Hu Jintao tendrá un difícil papel en el cónclave del G 8, donde deberá transmitir la imagen de un país responsable, dispuesto a colaborar, al mismo tiempo que insiste en la posición de su Gobierno: que los responsables del cambio climático son los países industrializados, y que a éstos corresponde liderar la lucha contra el problema.

Pekín defiende que deben ser las naciones avanzadas quienes recorten más sus emisiones, en lugar de presionar a las que están en vías de desarrollo para que acepten límites, que podrían restringir su crecimiento. La Agencia Internacional de la Energía (AIE) prevé que China supere a EE UU en 2009 como primer emisor de estos gases.

El proceso de elaboración del plan nacional chino contra el cambio climático no ha sido fácil. Debía haber sido publicado hace semanas, pero, según algunos activistas medioambientales, se ha ido retrasando debido a las discrepancias entre diferentes departamentos, por miedo a que los compromisos supusieran un freno para el crecimiento económico.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_